Actualizado 24/06/2009 22:42

Obama se reunirá con el Papa por primera vez el 10 de julio

Por Daniel Flynn

CIUDAD DEL VATICANO (Reuters/EP) - El presidente Barack Obama, cuyo apoyo al derecho al aborto para las mujeres y a la investigación de células madre ha hecho enojar a algunos católicos, tiene previsto reunirse con el Papa Benedicto XVI por primera vez el 10 de julio durante una visita a Italia.

Funcionarios del Vaticano dijeron que el mandatario estadounidense tendrá una audiencia durante la tarde con el Papa en el Vaticano tras la conclusión de la cumbre del 8 al 10 de julio del Grupo de las Ocho naciones industrializadas, que se celebrará en la ciudad italiana de L'Aquila.

"El Papa está listo para reunirse con el presidente de Estados Unidos Barack Obama en la tarde del 10 de julio", dijo a Reuters el vice portavoz del Vaticano Ciro Benedettini.

Obama ha hecho enojar a muchos católicos estadounidenses con su apoyo al derecho al aborto para las mujeres y su decisión de levantar las restricciones a la investigación de células madre, lo cual es posible que sea un tema de discusión en la reunión de julio.

En el 2001, el fallecido Papa Juan Pablo II instó al ex presidente de Estados Unidos George W. Bush a no permitir la investigación de células madre.

El Vaticano y líderes de la Iglesia Católica italiana condenaron la decisión de Obama en marzo de levantar las restricciones al financiamiento federal para la investigación de células madre embrionarios que fueron puestas por Bush.

La Iglesia Católica, otros grupos religiosos y defensores pro-vida se oponen a este tipo de investigación -que los científicos esperan que pueda generar curas para enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson- porque involucra la destrucción de embriones.

La posterior invitación de Obama a hablar en Notre Dame, una importante universidad católica estadounidense, provocó críticas el mes pasado. Mientras que algunos interrumpieron a Obama durante su discurso, su llamado a una discusión "sin prejuicios" sobre el aborto fue recibido con varias ovaciones.

La cumbre del G8 discutirá una respuesta a la crisis económica internacional y al calentamiento global. Su sede fue cambiada a L'Aquila en señal de solidaridad con las víctimas de un terremoto de abril que causó la muerte a alrededor de 300 personas y devastó grandes partes de la ciudad.