Publicado 19/06/2023 13:03

ONG piden a los Gobiernos que aumenten la protección de las aguas de la Antártida

Los pingüinos emperadores ven amenazado su hábitat ante el deshielo de la Antártida.
Los pingüinos emperadores ven amenazado su hábitat ante el deshielo de la Antártida. - JOHN WELLER

   MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -

   Varias ONG ambientales reclaman a los Gobiernos que se reúnen desde este lunes en la Reunión Especial de la Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos (CCRVMA) - CCAMLR (por sus siglas en inglés), que se celebra en Chile, que aumenten la protección de las aguas de la Antártida y pongan fin al "punto muerto" en que se encuentra la protección de este enclave.

   La reunión del CCRVMA busca avanzar en la designación de tres propuestas de área marina protegida (AMP) a gran escala en la Antártida Oriental, el Mar de Weddell y la Península Antártica, que llevan años debatiéndose, lo que supondría una superficie similar a la de la Unión Europea.

   La directora ejecutiva de la Coalición Antártica y del Océano Austral, Claire Christian, ha celebrado "con satisfacción" que los miembro de la comisión hayan reconocido la "necesidad" de dedicar más tiempo y atención a garantizar el consenso necesario para que estas propuestas de AMP superen este trámite. "Esperamos que los gobiernos aprovechen esta rara oportunidad y acudan a la reunión dispuestos a remangarse y negociar de buena fe para cumplir el mandato fundamental de la CCRVMA, que es la conservación", ha manifestado.

   La comisión lleva más de diez años sin establecer una red de área marina protegida y de momento sólo se han acordado dos AMP ya que en los últimos años no se ha conseguido el consenso pleno de sus necesarios para acordar una mayor protección.

   "Los líderes mundiales han acordado proteger el 30% del océano para 2030. Proteger el Océano Antártico Austral es fundamental para alcanzar ese objetivo. La designación de las tres AMP propuestas en la Antártida protegería casi 4 millones de kilómetros cuadrados del lugar que pingüinos, ballenas y focas llaman hogar. La reunión extraordinaria de esta semana en Santiago de Chile brinda la oportunidad de demostrar que se toman en serio la conservación", ha manifestado la directora de conservación de la Antártida y el Océano Austral del Proyecto Pew Bertarelli Ocean Legcy, Andrea Kavanagh.

   Por su parte, la directora de Conservación Antártica de WWF, Emily Grilly, ha recordado que el kril está en el centro de la red de vida de la Antártida y desempeña un papel importante en el ciclo global del carbono.

   Sin embargo, añade que la pesca altamente concentrada de krill en la Península Antártica y la región del Arco de Scotia, unida al cambio climático, "no sólo está amenazando la vida salvaje, como ballenas, pingüinos y focas, sino también las eficaces funciones ecosistémicas que proporciona el kril a través de sus servicios de almacenamiento de carbono".

   Grilly urge a los líderes políticos que aprovechen esta reunión "con prudencia" y que inclinen "urgentemente" la balanza en la región, desde la explotación hacia la protección".

   La CCRVMA es una organización basada en el consenso que consta de 27 miembros, incluida la UE y ocho de sus Estados miembros. El mandato de la CCRVMA incluye la ordenación pesquera basada en el enfoque ecosistémico, la protección de la naturaleza antártica y la creación de vastas áreas marinas protegidas que permitan al océano aumentar la resiliencia al cambio climático.

   En 2009, los países miembros de la CCRVMA comenzaron a asumir sus responsabilidades para establecer una red de AMP en todo el Océano Austral y crearon la primera AMP de alta mar en la plataforma sur de las islas Orcadas del Sur. En 2016 se acordó la mayor AMP del mundo en el mar de Ross (propuesta por Estados Unidos y Nueva Zelanda; 2,02 millones de km2).

   En la actualidad, existen tres propuestas para la creación de nuevas AMP en el océano Antártico. Dos propuestas por la UE y sus Estados miembros, junto con Australia, Noruega, Uruguay, Estados Unidos, Reino Unido, Nueva Zelanda, India, Corea del Sur y Ucrania: Antártida Oriental con 0,95 millones de km2, el Mar de Weddell - 2,18 millones de km2; La Península Antártica: de Argentina y Chile - unos 0,65 millones de km2.

   Proteger estas tres áreas permitiría salvaguardar casi 4 millones de kilómetros cuadrados de este océano, el equivalente a la superficie de la Unión europea y que representa el 1 por ciento del océano mundial. De lograrse, en su conjunto, supondría el mayor acto de protección oceánica de la historia.