Actualizado 09/08/2016 22:38

El pacto secreto del narcotraficante 'La Barbie' con Estados Unidos

LA BARBIE
REUTERS

   CIUDAD DE MÉXICO, 9 Ago. (Notimérica) -

   Édgar Valdez Villareal, alias 'La Barbie' es uno de los narcotraficantes más importantes de los últimos años. El Pacífico Sur mexicano fue el escenario perfecto para el tráfico de cocaína por el que fue detenido el 30 de agosto de 2010.

   El pasado mes de enero, este criminal estadounidense se declaró culpable por diferentes cargos como el tráfico de drogas y lavado de dinero, en un audiencia celebrada en la Corte Federal de Atlanta (Georgia). 'El Tigrillo', otro de los apodos con el que se le conoce, pertenecía al cártel de los hermanos Beltrán Leyva y lideraba la facción 'Los Negros'.

   Una vez que fue arrestado, 'la Barbie' contrató a uno de los mejores abogados estadounidenses para defender una reducción de sentencia y suplicar clemencia como ciudadano norteamericano. El letrado elegido, Kent A. Schaffer, había sido partícipe en diferentes juicios con personajes famosos.

   Consiguió su extradición el 15 de septiembre de 2015 pero durante estos años de arresto, el narcotraficante estableció lazos con los Estados Unidos junto con otros cuatro traficantes estableciendo un estricto intercambio, según informa el diario mexicano 'El Universal': proporcionar información del cártel que comandaba y de grupos rivales.

   Anteriormente, Valdez Villarreal se había declarado inocente por los delitos por los que se le culpa. Fue deportado a EEUU junto con otros 12 narcotraficantes, además de estar acompañado por su suegro (que también hizo referencia a su inocencia), Carlos Montemayor González.

   Diferentes documentos proporcionados por las fiscalías federales de Texas, Luisiana y Georgia (donde fueron juzgados por traficar desde Colombia, Costa Rica y México) detallan cómo era la estructura operativa comandada por Villarreal.

Su ascenso a la organización vino de la mano de Montemayor y su tío político, Juan Montemayor, quienes comandaron todos los envíos de droga que se realizaron a EEUU. Allí tenían tres socios que colocaban la mercancía en diferentes puntos del país. Se trata de Rubén Hernández, Roberto López, Jesús Ramos y Héctor Flores.

   En el año 2000, el narco dejó de dedicarse al territorio local para pasar a dominar más allá de las fronteras del país. Así, 'El Mike'-- que era como se le conocía cuando trabajó para un narco en Laredo llamado Adelmiro Ramírez-- pasó a denominarse como se le conoce actualmente.

   A través de lujosos regalos al clan de los Beltrán Leyva, el delincuente pasó a ocupar los puestos más altos de la estructura de sicarios. Le regaló un par de caballos con su propio entrenador al mayor de los hermanos, Arturo.

   Así, inició una alianza más confraternal con su suegro, uno de los grandes empresarios de la zona que también se interesó por sus relaciones con los Beltrán Leyva. Se casó con su hija y montaron un negocio propio. Éste estaba formado por jóvenes chicanos de ascendencia mexicana que transportaban la droga desde Texas a Atlanta.

Este tipo de tránsitos fueron destapados en la declaración de la Fiscalía Federal de Georgia el pasado 6 de enero y ahora se ha tenido acceso a ellos para conocer cómo ha sido la red que la liderado durante 10 años.

   Colombia y México son algunos de los destinos que aparecen en este estudio. El narcotraficante envió cerca de tres mil gramos de cocaína a Acapulco en un barco de pesca. En Estados Unidos cambió de móvil e hizo los transportes a través de tráilers. En Texas se llevaban a cabo los cobros aunque 'La Barbie' ya había colocado en diferentes estados unas oficinas para controlar la gestión.

   El órgano encargado de hacer este seguimiento fue la Administración para el Control de Drogas (DEA), que reconoció las voces del cabecilla y su suegro. Les siguieron la pista incluso cuando el narcotraficante comenzó a trabajar en el país norteamericano, donde traficaba inmensas sumas de dólares.

Sus colaboradores fueron detenidos y condenados a penas menores que tuvieron que complementar con grandes cantidades de dinero. Mientras, Villarreal y Carlos Montemayor continúan esperando una decisión judicial. Sin embargo, en relación al repentino cambio de opinión de inocente a culpable se le relaciona con distintas relaciones de interés que ejecutan los capos para pactar con los gobiernos que les retienen a cambio de información.