ROMA, 26 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha reivindicado la figura de San Esteban, en el día que se recuerda su santo, al tiempo que ha aprovechado para felicitar de nuevo la Navidad a los fieles y señalar que el mal se puede revertir "todos los días".
Francisco ha destacado así al primer mártir de la historia cristiana como "el primero de una multitud de hermanos y hermanas que siguen llevando la luz a las tinieblas: personas que responden al mal con el bien, que no ceden a la violencia y a la mentira, sino que rompen la espiral del odio con la mansedumbre del amor".
El pontífice ha rezado la oración mariana desde la Biblioteca del Palacio Apostólico Vaticano, y no asomado desde la ventana de su estudio privado para respetar así el estricto confinamiento en Italia que impide salir de casa sin razones justificadas.
Así, el Papa ha explicado que reza el ángelus sin fieles como una fórmula para disuadir la asistencia de gente en la plaza y para "colaborar con las disposiciones legales para ayudarnos a todos nosotros para salir de esta pandemia".
Durante su catequesis, el Papa ha insistido en la idea de hacer de la vida "una obra extraordinaria a través de los gestos ordinarios de cada día". Y ha agregado: "Dondequiera que vivamos, en la familia, en el trabajo, en todas partes, estamos llamados a ser testigos de Jesús, aunque sólo sea dando la luz de una sonrisa y huyendo de las sombras de la charla y el chismorreo".
A este respecto ha referido: "Cuando veamos algo malo, en lugar de criticar, chismorrear y quejarse, recemos por los que han hecho mal y por esa difícil situación". "Y cuando una discusión surge en casa, en lugar de tratar de prevalecer, tratemos de desactivarla; y comenzar de nuevo cada vez, perdonando a aquellos que nos han ofendido", ha concluido.