Actualizado 29/08/2015 12:23

Los periodistas tiroteados en directo fallecieron por disparos en la cabeza

   WASHINGTON, 28 Ago. (Reuters/ Notimérica) -

   La oficina del forense del estado de Virginia ha informado que los periodistas estadounidenses de la cadena 'WDBJ7', asesinados el miércoles durante una retransmisión en directo, la reportera Alison Parker de 24 años y el cámara Adam Ward de 27, fallecieron por varios disparos en la cabeza ejecutados por su excompañero, Vester Lee Flanagan.

   La muerte de los periodistas de la televisión local 'WDBJ7', filial de la cadena 'CBS', ha sido calificada de asesinato por el instituto forense de Roanoke, Virginia, al señalar que la causa de la muerte fueron las heridas de bala de cabeza y pecho, en el caso de la reportera, y los perpetrados en la cabeza y torso ocasionaron el fallecimiento del cámara Adam Ward.

   Los trabajadores de la filial de la 'CBS' fueron tiroteados en directo este miércoles cuando realizaban una entrevista a Vicki Gardner, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio, en el centro comercial Bridgewater Plaza del condado de Franklin.

   Los dos reporteros fallecieron por las heridas de bala, el agresor, tras darse a la fuga y en un intento de suicidio con su vehículo, también murió fruto de golpes y la única superviviente, Gardner, tras haber recibido varios disparos, ha despertado este viernes del coma inducido.

   Vicki Gardner ha revelado, a través de su marido Tim en declaraciones para la 'ABC News', que el atacante intentó dispararla en tres ocasiones, aunque solo logro perpetrar un tiro debido al mal funcionamiento del arma.

   "Disparó tres veces a mi esposa y ella esquivó todas las balas que pudo. Logró tirarse al suelo y esconderse tras una bola. Fue entonces cuando él se acercó y, por la espalda, disparó por tercera vez", ha afirmado Tim Gardner.

   Un total de 4.000 personas fueron testigos del ataque televisado por la WDBJ7, incluido el propio señor Gardner. Al poco de la tragedia, el reportero publicó un vídeo de los hechos en las redes sociales donde claramente se visualizaban los asesinatos, junto a una carta enviada a la cadena 'ABC'.

   En la carta de 23 páginas, firmada por el supuesto autor del tiroteo, explicaba que se sintió inspirado por la matanza racista en una iglesia frecuentada por la comunidad afroamericana de Charleston. "¿Por qué lo hice? Cargué mi pistola el 19 de junio de 2015. El tiroteo en Charleston ocurrió el 17 de junio de 2015", reza la misiva, cuya autenticidad no se ha podido verificar.

   Tras el tiroteo y publicación de grabaciones, estas rápidamente censuradas por las autoridades norteamericanas, el agresor Lee Flanagan se autodisparó en el interior de su vehículo al verse acorralado por la Policía en un intento de huída por la Interestatal 66. Falleció posteriormente debido a la profundidad de la herida de bala en el hospital Inova Fairfax, del condado de Fauquier.

   Familiares y compañeros de Flanagan han declarado que tras ser despedido por la cadena 'WDBJ7' en 2012, debido a "un comportamiento perturbador" --apenas un año después de ser contratado como reportero--, había desarrollado una conducta grave y necesitaba tratamiento psicológico.

   La 'WDBJ', tras este trágico suceso, ha continuado retransmitiendo, aunque, a veces, casi bajo lágrimas en directo. El total de su personal, junto a los periodistas y principales medios de comunicación del país han respondido en las redes sociales con mensajes y hashtags de apoyo como #WeStandWithWDBJ, además de solicitar que las personas con desórdenes mentales no sean autorizados a portar armas de fuego.

   Momentos después del incidente, el director de noticias de la 'WDBJ', Greg Baldwin, declaró aturdido a la 'ABC': "¿Volverá a la cadena para matarnos a todos?".

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