Actualizado 14/06/2017 13:03

Un preso argentino envía cartas al juez para confesar y pedir que le juzguen después de que se archivara su causa

DETENIDO
EUROPA PRESS

   CASTELLÓN (ESPAÑA), 14 Jun. (EUROPA PRESS/Notimérica) -

   Un hombre de origen argentino, condenado por diversos delitos, envió hasta 10 cartas desde la prisión a un juez que instruyó un robo en una joyería en la Vall d'Uixó (España) en 2011 para confesarse autor de los hechos. La causa ya estaba archivada, se abrió una nueva investigación y se le ha fijado un año y un día de prisión.

   Así consta en la sentencia, en la que el tribunal le impone la pena de un año y un día de cárcel por un delito de detención ilegal en concurso medial con un delito de robo con violencia y una falta de lesiones, con las circunstancias atenuantes de toxicodependencia, confesión y dilaciones indebidas.

   Este hombre cumplía condena en el centro penitenciario 'La Moraleja' de Dueñas por delitos como robo con violencia en casa habitada, amenazas en el ámbito de la violencia de género, lesiones o tenencia ilícita de armas.

   En 2011 cometió un robo en una joyería de la Vall d'Uixó pero la causa se archivó al no poder determinarse la identidad de los autores. Dos años después, en 2013, desde prisión, el hombre decidió confesar lo que hizo y mandó una primera carta al juez.

   En los meses siguientes, dirigió al juzgado otros nueve escritos en los pedía un inmediato enjuiciamiento. Tras comprobarse la veracidad de sus declaraciones, el juez abrió un procedimiento y se le condenó por este atraco.

   El robo tuvo lugar el 29 de octubre de 2011 cuando el acusado, en compañía de una persona que no ha sido identificada, entró en el establecimiento comercial, se ganó la confianza de la dependienta y en un descuido de ésta la encañonó con una pistola. Posteriormente, él y su cómplice se apropiaron de joyas valoradas en más de 45.000 euros y se dieron a la fuga.

   El juicio se celebró el pasado 24 de mayo en la Audiencia Provincial de Castellón. El fiscal, que inicialmente pedía dos años de cárcel, y la defensa del acusado alcanzaron un acuerdo y la Sala dictó sentencia de conformidad conforme a ese pacto: el atracador, de nacionalidad argentina, ha sido condenado a un año de prisión.