BUENOS AIRES, 14 Jul. (Notimérica) -
Un niño de la ciudad de Buenos Aires murió el pasado mes de junio a causa de un caso aparente de violencia familiar y el Ministerio de Educación porteño ha decidido apartar a dos profesoras del centro escolar al que acudía, por no haber alertado a las autoridades de los indicios de maltrato.
El domingo 7 de junio el pequeño Agustín, de cinco años, fue trasladado al hospital después de que su padrastro realizara una llamada pidiendo asistencia médica urgente, ya que el niño estaba agonizando.
A pesar de que fue trasladado al hospital, el niño murió debido a la gravedad de las heridas que, según reveló la autopsia, habían sido provocadas por traumatismos múltiples y las autoridades policiales detuvieron al padrastro como principal sospechoso.
El caso causó tal conmoción, que el Ministerio de Educación de la ciudad de Buenos Aires tomó la decisión de suspender --con goce de sueldo-- a la directora y a una maestra del centro educativo al que acudía el niño, ya que Agustín había presentado continuamente indicios de sufrir violencia pero nunca se había informado a las autoridades.
Esta decisión ha causado malestar entre el cuerpo docente de la ciudad, que este miércoles hará un día de huelga en solidaridad con las profesoras desplazadas de su cargo y reclamando "justicia por Agustín y todos los niños víctimas de violencia", en palabras del sindicalista de la Unión de Trabajadores de la Educación, Eduardo López.
INDICIOS REITERADOS.
Desde el Gobierno de la ciudad responden que se habían producido señales reiteradas de que Agustín sufría violencia familiar: "Registró un 50% de inasistencias; en tres ocasiones llegó golpeado: una vez apareció con dos dientes menos y las otras tenía diversos golpes", explicó la subsecretaria de Equidad Educativa, Soledad Acuña.
Según explican, la madre aducía que el niño era muy torpe y que se caía a cada rato, posiblemente a causa de alguna enfermedad de tipo neurológico, aunque desde el Gobierno de la ciudad no creyeron en estos argumentos.
"La escuela es el último garante de derechos de los niños. No se dio aviso a los equipos de orientación escolar, tampoco a la guardia de abogados del Consejo, no se respetó ningún protocolo", indicó Acuña.
Una de las profesoras apartadas de su cargo, Alejandra Bellini, se defendió diciendo que "el nene no fue todos los días a clase con la cara abollada, en ningún momento hubo presunción de que tuviera una situación familiar violenta".
Las maestras fueron apartadas temporalmente de su cargo, según señaló el ministro de Educación de la ciudad, Esteban Bullrich, "porque hay una investigación penal en curso", aunque aclaró que "siguen cobrando su salario".