Actualizado 28/10/2014 23:29

UNICEF: La crisis aumenta la pobreza infantil en 34 de los 50 estados de EEUU

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Foto: OBRA SOCIAL 'LA CAIXA'

MADRID, 28 Oct. (Notimérica) -

   La crisis económica ha dejado a 2,6 millones de niños por debajo del umbral de la pobreza en los países desarrollados desde 2008, y sólo en Estados Unidos ha afectado a 34 de los 50 estados del país, según un informe del Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) publicado este martes.

   En Estados Unidos, donde la pobreza infantil extrema ha aumentado más en esta crisis que durante la recesión de 1982, las medidas de la red de protección social han proporcionado un apoyo importante a las familias trabajadoras pobres, pero han sido menos eficaces para quienes viven en la pobreza extrema y no tienen trabajo. En 2012, 24,2 millones de niños vivían en la pobreza, un aumento neto de 1,7 millones desde 2008.

   Según los datos de este nuevo informe, el número total de menores que viven en pobreza en el mundo desarrollado se eleva ya a unos 76,5 millones. "El mayor incremento de la pobreza infantil se ha producido en los países del sur de Europa: España, Grecia e Italia, así como en Croacia, los tres Estados bálticos y otros tres Estados muy castigados por la recesión: Irlanda, Islandia y Luxemburgo", asegura el texto.

   Por el contrario, en 18 países la pobreza infantil disminuyó, a veces de forma notable. Australia, Chile, Finlandia, Noruega, Polonia y la República Eslovaca redujeron su tasa en torno a un 30 por ciento.

RECORTES PRESUPUESTARIOS

   Entre las conclusiones, UNICEF destaca que, aunque los programas de estímulo económico temprano adoptados por algunos países fueron efectivos a la hora de proteger a los niños, en 2010 la mayoría de los países pasaron bruscamente de una política de estímulo presupuestario a los recortes presupuestarios, con un impacto negativo en los niños, sobre todo en la región mediterránea.

   "Muchos países ricos han sufrido un gran salto hacia atrás en términos de ingresos de los hogares, y el impacto en los niños tendrá secuelas prolongadas para ellos y para sus comunidades", ha valorado el director de Política y Estratégica Global de UNICEF, Jeffrey O'Malley.