Actualizado 04/09/2012 13:05

Venezuela.- El Gobierno insiste en que no hubo una matanza de yanomamis pero los indígenas piden que se investigue

Once tribus y organizaciones que defienden sus derechos dicen que "no se puede decir que no hay evidencias" y pide al Gobierno que siga investigando


CARACAS, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Tareck el Aissami, ha insistido en que la noticia sobre la supuesta matanza de 80 indígenas de la etnia yanomami en el estado de Amazonas es falsa y ha denunciado que ningún medio de comunicación privado ha desmentido la información. Sin embargo, los nativos mantienen que los hechos ocurrieron y exigen que se investiguen.

"Llegamos a todas las comunidades. No hay ningún signo de violencia de nada y desde hace 24 horas no nos hemos cansado de declarar que es mentira, pero los medios no han publicado nada respecto a eso", declaró este lunes durante la inauguración de un seminario en Caracas, según la Agencia Venezolana de Noticias.

"Quedó en el imaginario colectivo que asesinaron a 80 indígenas y no hubo reacción de parte del Estado venezolano. Nadie desmintió, ningún medio se retractó de la información y eso pasa todos los días", recalcó el ministro.

A su juicio, "quien lee los titulares de prensa lo que ve es un Estado de ingobernabilidad, que las comunidades más desposeídas están desprotegidas de la institucionalidad del Estado, que el Estado no es capaz de garantizar la vida a las comunidades indígenas ni al pueblo".

El Aissami explicó que el pasado domingo concluyeron una serie de visitas a las comunidades indígenas que viven en el municipio de Alto Orinoco, junto a la frontera con Brasil, y no se encontró ninguna prueba de que se hubiesen producido actos de violencia.

"Gracias a Dios, lo que hay allá es un modelo de vida que ojalá estuviese en todo el país, de respeto absoluto a la naturaleza", afirmó el titular de la cartera de Interior, que acusó a los medios de comunicación de no ayudar a solucionar los problemas en materia de seguridad ciudadana.

LOS INDÍGENAS MANTIENEN SU VERSIÓN DE LOS HECHOS

Survival International, una organización que defiende los derechos de los indígenas, dijo la semana pasada que un grupo de mineros brasileños cruzaron la frontera el pasado julio y atacaron una aldea desde un helicóptero, acabando con la vida de decenas de indígenas.

Al parecer, la tribu no informó a las autoridades de lo sucedido hasta agosto porque vive en una zona selvática remota. En un comunicado conjunto, once tribus (incluidos los yanomamis) y organizaciones que defienden sus derechos han subrayado que "no se puede decir que no hay evidencias" y han presionado al Gobierno para que siga investigando.

Según los firmantes del comunicado, el Ejecutivo del presidente Hugo Chávez ha llegado a una conclusión de forma prematura. En su opinión, lo remoto de la región y el hecho de que los yanomamis sean nómadas hace poco probable que las autoridades pudiesen haber encontrado el lugar exacto donde supuestamente ocurrieron los ataques.

Los yanomamis han informado a las autoridades de que sólo tres miembros de la aldea siguen vivos. Esas tres personas estaban cazando cuando escucharon el sonido de un helicóptero, disparos y explosiones, así que alertaron a los yanomamis de otro asentamiento, quienes fueron a la aldea y encontraron cadáveres carbonizados.

Sin embargo, el general Rafael Zambrano, comandante de la unidad del Ejército venezolano responsable de la región, dijo que sería muy difícil que unos agresores extranjeros hubiesen realizado un ataque como ese, con armas y explosivos desde un helicóptero y en un lugar tan remoto. En una entrevista telefónica con la agencia Reuters, Zambrano indicó que una pequeña patrulla de soldados sigue revisando la zona.

El Gobierno de Brasil dijo la semana pasada que había solicitado a Venezuela más información sobre el supuesto ataque y si había brasileños involucrados. Este lunes, el Ministerio de Relaciones Exteriores señaló que aún no ha recibido ninguna petición por parte de Venezuela para que colabore en la investigación.