Migrantes cruzan el río en Tijuana para llegar a la frontera con EEUU
REUTERS / KIM KYUNG HOON

   "Los niños son niños y no tienen la culpa de estar pasando por lo que están pasando", defiende un responsable de la ONG

   MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -

   Los niños que viajan en las varias caravanas de migrantes que están atravesando México con destino a Estados Unidos están sufriendo "un estrés al que no deberían estar expuestos" y requieren de protección puesto que se encuentran en una situación de vulnerabilidad que no han elegido, ha advertido la ONG World Vision.

   Según ha explicado a Europa Press el coordinador de Asuntos Humanitarios y Emergencias de la organización en México, Jorge Navarro, la situación en la ciudad mexicana de Tijuana, donde ayer medio millar de migrantes trataron de cruzar por la fuerza hacia Estados Unidos antes de ser reprimidos por las fuerzas de seguridad de ambos países "es muy tensa".

   Afortunadamente, en los incidentes de este domingo no hubo muchos niños implicados, aunque algunos sí se vieron afectados por los gases lacrimógenos empleados, pero lo cierto es que esta situación, tras haber atravesado en algunos casos varios países desde que abandonaron sus hogares, está teniendo un impacto en ellos.

   Por una parte, ha explicado Navarro, se ha observado que "están consumiendo una dieta alta en carbohidratos y sin acceso a fibra y proteínas", de ahí el que desde World Vision se está trabajando a través de socios locales en distribuir a menores alimentos ricos en fibra y proteínas.

   El otro problema esencial con el que se están encontrando es el impacto psicológico por lo vivido. Según el responsable de World Vision, hasta el espacio amigo para la infancia que la ONG ha instalado en Tijuana con capacidad para 1.000 niños cada día llegan más padres preocupados por sus hijos.

   "Un padre llegó buscando un psicólogo y nos dijo que su hijo de 3 años había cambiado mucho. Antes era tranquilo y obediente y ahora está mucho más rebelde y agresivo", señala Navarro, denunciando que "los niños están expuestos a un grado de tensión y estrés al que no deberían estar expuestos".

   Es ahí donde entra precisamente la labor del espacio amigo, en el que se realizan actividades, "todas mezcladas con el juego" y en las que se busca reforzar la autoestima de los menores. Además, permite a la ONG identificar "los casos críticos" para referirlos a las autoridades o a otras organizaciones que trabajan en la materia.

   Según sus estimaciones, a falta de un censo real del número de migrantes en tránsito en estos momentos en México, habría unos 3.500 menores migrantes actualmente. Estos niños, defiende, requieren "protección".

LOS NIÑOS NECESITAN PROTECCIÓN

   "Lo que le pido a todos los gobiernos, no solo al mexicano, es que protejan a los menores porque están en una ruta migratoria, están extremadamente expuestos, no tienen la confianza para poder expresar sus emociones y las situaciones que han vivido, si han presenciado o no violencia", reclama Navarro. "Los niños son niños y no tienen la culpa de estar pasando por lo que están pasando", insiste, defendiendo en que hay que evitar que "se vean expuestos".

   Según Navarro, están detectando una "creciente preocupación" entre los padres, ya que no está claro cómo va a evolucionar la situación. Sus hijos encuentran en el espacio gestionado por World Vision "un lugar seguro" y al mismo tiempo les permite a los padres hacer gestiones o buscar empleo o comida.

   Entre los menores hay también algunos no acompañados, principalmente adolescentes, los cuales se enfrentan a "un nivel de riesgo altísimo" y son particularmente vulnerables entre otras cosas al reclutamiento por grupos armados. Para ellos también se están elaborando programas específicos con los que informarles "de los riesgos que se exponen en el camino, independientemente de lo que decidan" y se les ofrecen "herramientas para mitigar ese riesgo el máximo posible".

   Navarro reconoce que es difícil saber "qué va a pasar", ya que las varias caravanas en marcha mantienen sus movimientos en secreto "para protegerse a sí mismos", pero admite que la situación puede tardar varios meses en resolverse. En realidad, resume, tienen tan solo tres opciones: "o se vuelven a sus países, o se quedan en Tijuana o cruzan hacia Estados Unidos".

MUCHAS FAMILIAS OPTAN POR QUEDARSE EN MÉXICO

   En este sentido, precisa que parece que la gran mayoría de quienes están solicitando asilo en México son padres con hijos, como han podido comprobar en varios puntos del recorrido en el país. Sin embargo, advierte, iniciar el trámite para solicitar asilo no significa que este se consiga de forma automática, sino que el proceso puede demorarse durante casi dos meses y puede ser denegado.

   El responsable de World Vision reconoce que las autoridades mexicanas están informando a los migrantes sobre cómo solicitar el asilo, el procedimiento a seguir y lo que se tarda, pero "los migrantes se sienten muy inseguros" y desconfían de lo que les piden. "Cuando les dicen que tienen que ir a cierto albergue o dar su nombre real, hay mucho miedo y es normal porque muchos de ellos están huyendo de la violencia y no quieren que los actores de la violencia en sus países sepan dónde están", añade.

   La falta de datos sobre los movimientos de las caravanas impide a las organizaciones humanitarias, tanto locales como internacionales, planificar su asistencia, lo que "en algunos momentos ha hecho que nos veamos superadas", admite, subrayando que la falta de agua y saneamiento es uno de los problemas más acuciantes en la actualidad.

   "No hay baños y duchas suficientes para todos", resalta, apuntando a que podrían producirse brotes de enfermedades. Según el responsable, las temperaturas más bajas con las que se encuentran los migrantes en México en comparación con sus países de origen también están haciendo mella en su salud y se están detectando problemas respiratorios y gripes.