MADRID, 17 Jul. (TRENDSmérica) -
Este jueves se ha puesto fin a la primera Semana de la Moda Masculina de Nueva York (NYFWM, por sus siglas en inglés) que, a pesar de que en el ámbito artístico no ha destacado por sus apuestas innovadoras y arriesgadas, sí que ha supuesto un gran paso para el género masculino.
Llegó el turno de los hombres, y lo hizo durante cuatro días, del 13 al 16 de julio, un periodo corto si se compara con las semanas de la moda femenina, de ocho días de duración.
No obstante, este punto no ha sido el único que no ha tenido en común con su homóloga femenina. Quedan lejos la puesta en escena y teatralidad del gran espectáculo que ofrece la edición más veterana, algo que esta nueva versión ha compensado con un buen soporte comercial y una perfecta ejecución.
Ubicada en las instalaciones del Skylight Clarkson Square, en el Soho, la NYFW Men's ha demostrado que ha llegado para quedarse. Con patrocinadores como Tumblr, Cadillac y Amazon, entre otros, la recién estrenada semana de la moda masculina mostró las propuestas para la temporada primavera/verano 2016 de más de 50 diseñadores.
En esta ocasión, el look andrógino que tan presente ha estado durante las últimas temporadas en las pasarelas, no ha faltado en esta cita en la que, diseñadores como Alexander McQueen, han optado por vestir con faldas a sus modelos, mientras que otros, como Duckie Brown, se rendían a las transparencias en sus prendas.
EL NO DESFILE DE CALVIN KLEIN.
La firma Calvin Klein, por su parte, llevó los tejidos a otra categoría, utilizando incluso la tela vaquera para jerseys que no abrigan y poniendo en sus skinny jeans cinturones desabrochados que no dejan de ser más que un mero adorno.
Propuestas que, sin duda, eran una clara declaración de intenciones a esta idea de realizar una semana de la moda exclusivamente para hombres. Porque no se trató de los tejidos, ni de la paleta cromática lo que dio que hablar acerca de Calvin Klein.
La marca abandonó la puesta en escena habitual por una que se asemejaba, más bien, a un escaparate, al no realizar desfile ni contratar modelos, sustituyéndolos por maniquíes.
TOMMY HILFIGER.
En contraste con una reivindicativa Calvin Klein, Tommy Hilfiger no da sorpresas en su desfile, manteniéndose en la línea de las propuestas de la firma. Prendas coloridas, que van desde el blanco y el negro al amarillo, rojo, verde y azul. Eso sí, sin perder la pureza cromática que tanto caracteriza a la marca.
La colección, llamada 'Flex', hace honor a su nombre con unos conjuntos volátiles que sirven para diferentes situaciones. Dirigidas a un público joven pero conservador, con cortes de pelo clásicos e innovaciones recatadas, como sus corbatas informales y de punto.
MICHAEL KORS, SIN BOLSOS.
Los complementos no han estado demasiado presentes en esta primera edición, en la que diseñadores como Michael Kors, han preferido omitir el bolso en casi todos sus conjuntos, su prenda estrella, que también está hecho para los hombres.
Aún así, aunque la firma no ha querido meter este complemento en exceso, lo que sí que ha introducido ha sido el foulard, presente en casi todos sus modelos, así como las gabardinas, que dan la apariencia de batas de élite y caen con delicadeza sobre el cuerpo de los modelos. En cuanto a los colores, Michael Kors se ha mantenido en los tonos blanco, grisáceos, beige y negro. En los pies, sandalias de piel y sin calcetines.
Otras propuestas destacadas son las de Richard Chai y su look multicapa, basado en la superposición de prendas y tejidos, Thom Browne, inspirado en Japón, o Michael Bastian, que hace viajar a su público hasta el barrio de Bel Air para dar paso a la inspiración 'preppy' en sus chaquetas y shorts, estampados y coloridos.
No pudo faltar tampoco la presencia latina en esta cita con la moda en la gran manzana, donde el mexicano Ricardo Seco mostró su colección 'Luck', inspirada en el juego de la lotería.
El broche final lo puso el estadounidense John Varvatos, que llevó al Soho el más puro look del rock and roll de los años 70, acompañado de melenas alborotadas y afros.
SEMANA DE NEGOCIOS.
Finaliza así un espacio de la moda que ha llegado para quedarse. Sin embargo, en cuanto a su repercusión mediática, ha quedado demostrado que se queda muy lejos de su homóloga femenina.
Los hombres aún tienen un largo recorrido por delante para ganarle terreno, en este ámbito, a las mujeres. Por el momento, se esperan las cifras para saber si esta semana, que está más bien dedicada a los negocios, como ha demostrado la firma Calvin Klein, ha compensado a las marcas y a sus patrocinadores.