Publicado 29/11/2019 10:55

Cambiar a inhaladores 'verdes' podría reducir las emisiones de carbono

   MADRID, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -

   Muchos inhaladores actuales para afecciones como el asma contienen propulsores que son potentes gases de efecto invernadero. Un estudio de investigadores de la Universidad de Cambridge descubrió que cambiar a inhaladores más ecológicos alternativos no solo generaría grandes ahorros de carbono, sino que podría lograrse la reducción de los costes de los medicamentos mediante el uso de marcas menos costosas.

   Los inhaladores de dosis medida contienen gases licuados y comprimidos que actúan como propulsores para atomizar el fármaco que se administra y bombearlo al usuario. Originalmente, los clorofluorocarbonos (CFC) se usaban como propulsores, pero estos potentes gases de efecto invernadero y sustancias que agotan el ozono ahora están prohibidos por ello han sido reemplazados por propulsores de hidrofluoroalcano (HFA).

   Si bien los HFA no son perjudiciales para la capa de ozono, siguen siendo potentes gases de efecto invernadero, y actualmente los inhaladores de dosis medida contribuyen con un 3,9% de la huella de carbono del Servicio Nacional de Salud en el Reino Unido. En 2017, se prescribieron alrededor de 50 millones de inhaladores en Inglaterra, de los cuales siete de cada diez eran inhaladores de dosis medida, en comparación con solo uno de cada diez en Suecia.

   Ha habido llamamientos para cambiar de inhaladores HFA debido a su impacto ambiental. Ya existen alternativas efectivas, como los inhaladores de polvo seco y los inhaladores de niebla acuosa. Cambiar a inhaladores con una huella de carbono más baja es una parte clave de la estrategia de la Unidad de Desarrollo Sostenible de la Sanidad británica. Sin embargo, una barrera importante para cambiar a inhaladores alternativos es el mayor precio "inicial" de algunos inhaladores de polvo seco.

   En un estudio publicado la revista 'BMJ Open', un equipo de investigadores estudió los datos de prescripción de la Sanidad Pública de Inglaterra en 2017 y compiló los datos de la huella de carbono en los inhaladores comúnmente utilizados para comparar los costos financieros y ambientales de los diferentes inhaladores.

   La información sobre la cantidad de propelente de HFA en los inhaladores de dosis medida no está disponible públicamente, por lo que los investigadores estimaron el contenido de los inhaladores revisando publicaciones, patentes y estudios de rendimiento de inhaladores para obtener información sobre el peso de los inhaladores vacíos y llenos.

   Así, calcularon la huella de carbono multiplicando el peso estimado del propelente HFA por su potencial de calentamiento global (una medida de cuánto calor atrapa un gas de efecto invernadero en la atmósfera durante un tiempo específico, en relación con el dióxido de carbono).

   El equipo descubrió que las huellas de carbono de los inhaladores de dosis medida eran entre 10 y 37 veces las de los inhaladores de polvo seco. En los niveles de prescripción de 2017, reemplazar uno de cada diez inhaladores de dosis medida en Inglaterra por los inhaladores de polvo seco equivalentes más baratos podría conducir a una reducción en los costos de medicamentos de 8,2 millones de libras esterlinas anuales (unos 9,5 millones de euros) y reduciría las emisiones equivalentes de dióxido de carbono en 58 kilotones, aproximadamente lo mismo que de 180.000 en coche de Londres a Edimburgo, que distan 450 kilómetros.

   A nivel individual, cada inhalador de dosis medida reemplazado por un inhalador de polvo seco podría ahorrar el equivalente de entre 150 y 400 kg de CO2 anualmente, lo cual es similar a muchas acciones que las personas con problemas ambientales ya están tomando en casa, como instalar aislamiento de pared en hogar, reciclaje o reducir el consumo de carne.

   "Cualquier movimiento hacia inhaladores 'más verdes' necesitaría asegurar que los reemplazos fueran rentables --precisa el doctor Alexander Wilkinson, consultor en Medicina Respiratoria de East and North Hertfordshire NHS Trust--. Al cambiar a marcas menos costosas, hemos demostrado que aún sería posible tener un impacto positivo en las emisiones de carbono y al mismo tiempo reducir los costos de los medicamentos".

   "Es importante enfatizar que los pacientes no deben dejar de usar sus tratamientos habituales para reducir su huella de carbono, sino que recomendamos que los pacientes revisen su enfermedad y tratamiento al menos anualmente con su profesional de la salud y en este punto discutan si un inhalador más ecológico es disponible y apropiado en su situación", añade.

   Otras acciones que las personas pueden tomar para reducir la huella de carbono de sus inhaladores pasan por asegurarse de que estén usando su inhalador correctamente, ya que los errores en la técnica son comunes; devolver los inhaladores usados las farmacias para su eliminación adecuada, ya que a los inhaladores de dosis medida les queda algo de propulsor cuando terminan; y, si su inhalador no tiene un contador de dosis, asegúrese de que sepan cuántas dosis contiene para evitar que se agote, o deseche los inhaladores medio llenos.

   "El cambio climático es una amenaza enorme y actual para la salud que afectará desproporcionadamente a los más pobres y vulnerables del planeta, incluidas las personas con enfermedades pulmonares preexistentes", recuerda el doctor James Smith, consultor en salud pública del Departamento de Salud Pública y Atención primaria en la Universidad de Cambridge.

   "Nuestro estudio muestra que cambiar a inhaladores que son mejores para el medio ambiente podría ayudar a las personas, y al sistema sanitario en general, a reducir su impacto en el clima de manera significativa. Este es un paso importante hacia la creación de un sistema de salud sin carbono adecuado para el siglo XXI", concluye.