MADRID 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
El director del Instituto de Dermatología Integral (IDEI), Miguel Sánchez Viera, ha señalado que la cirugía micrográfica frente al melanoma reduce "al mínimo" la posibilidad de recidivas, además de ser una técnica que consigue tasas de curación superiores al 95 por ciento cuando la enfermedad está en fases iniciales.
"El tumor se va eliminado capa a capa, siendo analizada cada una de ellas en quirófano hasta que las células cancerosas son eliminadas por completo, realizando un doble chequeo microscópico", ha explicado el también especialista en cirugía micrográfica de Mohs.
De este modo, la técnica, que es ambulatoria en la mayoría de los casos, preserva la mayor cantidad de tejido sano y reduce el tamaño de la herida quirúrgica, lo que hace que el tiempo de la recuperación del paciente y la posibilidad de problemas con la cicatrización sean menores.
La cirugía micrográfica se posiciona así como una técnica precisa y eficaz frente al melanoma, cuyos diagnósticos aumentan cada año. Según datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), en 2024 se diagnosticaron 7.900 cánceres de este tipo, mientras que durante este año se prevé que el número aumente hasta los 9.400, lo que supone un incremento de casi el 20 por ciento.
PREVENCIÓN Y DIAGNÓSTICO PRECOZ
La exposición excesiva al sol y las quemaduras solares repetidas son una de las principales causas del melanoma, además de factores genéticos como haber tenido un melanoma previo, tener un familiar directo que lo ha padecido, tener la piel muy clara o presentar un gran número de lunares, incluso alguno congénito.
Por ello, Sánchez Viera ha destacado que muchos casos de este cáncer se pueden prevenir o diagnosticar en etapas precoces siguiendo una serie de consejos relacionados con el sol y acudiendo de forma periódica a la consulta del dermatólogo.
En cuanto a las recomendaciones, ha apuntado que se evite una exposición continuada e intensa al sol, o en las horas centrales del día, es decir, entre las 11 y las 18 horas. Además, ha instado a emplear fotoprotector de manera adecuada, 30 minutos antes de la exposición y volviendo a aplicarlo cada dos horas o después de un baño o de haber sudado mucho.
También ha sugerido que se utilicen sombreros o gorras para proteger la cabeza, así como prendas holgadas para cubrir el resto del cuerpo y ha precisado que en la actualidad existe ropa con factor de protección incorporada que puede ser útil en la playa o la piscina. Por último, ha pedido que no se acuda a cabinas de bronceado porque aumentan de manera potencial la aparición de melanomas.
Respecto al diagnóstico, ha detallado que cada persona debe autoexplorarse los lunares mediante la regla ABCDE para observar si hay cambios que indiquen un posible melanoma. Siguiendo las siglas, la A corresponde a asimetría; la B son bordes irregulares; la C indica un cambio de color; la D responde a un diámetro superior a seis milímetros; y la E es evolución, es decir, cuando un lunar va cambiando en un periodo corto de tiempo.
En esta línea, ha explicado que la dermatoscopia digital, acompañada de un mapeo corporal de lunares, han demostrado ser la prueba más efectiva para detección precoz del melanoma. "Se realizan mediante equipos de fotografía digital que realizan un mapa seriado de nuestra piel, asociado a la detección mediante microscopia de superficie lesiones sospechosas, almacenando las imágenes para su seguimiento y comparación posterior", ha precisado.