SEVILLA 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía ha declarado área en alerta al municipio de Castilblanco de los Arroyos, con 5.171 habitantes y ubicado en la provincia de Sevilla, tras confirmarse la circulación del virus del Nilo occidental (VNO) en mosquitos Culex perexiguus procedentes de una trampa situada en el término municipal próximo a la Urbanización Las Colinas y perteneciente al sistema de vigilancia entomológica de la Diputación de Sevilla.
Asimismo, ha decretado la elevación del nivel de riesgo de medio a alto de todo el municipio una vez finalice el periodo de área en alerta. Salud y Consumo ha decretado estas medidas tras recibir por parte del laboratorio que realiza la identificación de especies de mosquitos, densidad y presencia del virus del Nilo occidental los resultados de los análisis realizados a un lote de mosquitos capturados en la trampa situada en el municipio sevillano.
Una vez realizada la evaluación epidemiológica de este hecho, teniendo en cuenta las distancias a núcleos de población y las condiciones ambientales, y de acuerdo con lo establecido el vigente Programa de vigilancia y Control integral de vectores de la Fiebre del Nilo occidental de Andalucía, la Consejería de Salud ha decretado declarar el área de alerta en el municipio durante cuatro semanas seguidas sin que se evidencie nueva circulación del virus del Nilo occidental.
La Consejería ha trasladado inmediatamente la información y la decisión adoptada a la Diputación de Sevilla y al Ayuntamiento de Castilblanco de los Arroyos.
Además, teniendo en cuenta esta nueva situación así como la importante abundancia de mosquitos en algunos pueblos de la comarca de especial seguimiento del Bajo Guadalquivir, la Consejería ha convocado la mesa técnica provincial FNO para este próximo lunes.
La declaración del área en alerta, por un periodo mínimo de cuatro semanas o hasta que durante un periodo equivalente no se declaren nuevos casos ni se detecte la circulación del virus en los mosquitos vectores de esta enfermedad, aves o équidos en este territorio, supone intensificar las tres vigilancias (entomológica, animal y humana) en la zona, activar las acciones de promoción en campamentos y residencias del entorno y reforzar las acciones de comunicación a la ciudadanía a través de farmacias comunitarias y enfermería para que adopte las medidas de protección necesarias frente al VNO.
Por su parte, la administración local debe intensificar las medidas de control y tratamiento de mosquitos transmisores de la enfermedad durante el periodo que el área esté en alerta.
Así, debe intensificar las medidas contempladas en su Plan Municipal de vigilancia y Control de vectores transmisores del virus del Nilo Occidental, no solo en los núcleos de población sino también en aquellos lugares o localizaciones situados a no más de 1,5 kilómetros identificados como focos larvarios o refugios de adultos.
Además, se deberá atender a las observaciones realizadas por el Agente de Salud tras la verificación realizada el mes de julio. En caso necesario, se deberá valorar la realización de tratamiento adulticida perimetral en los núcleos de población existente, específicamente en el núcleo denominado Urbanización Las Colinas.
La vigilancia humana, entomológica y animal del virus del Nilo occidental (VNO), incluidas en el Programa de Vigilancia y Control Integral de Vectores de la Fiebre del Nilo Occidental para 2025 de la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, ha descartado de momento casos confirmados en humanos, habiéndose realizado estudios de laboratorio para descartar infección por virus del Nilo en un total de 224 usuarios y todos han resultado negativos. Durante esta semana tampoco se han registrado nuevos casos en equinos ni en aves.
No obstante, se mantiene aún como área en alerta el municipio de Zurgena, en Almería, tras la detección de circulación del virus del Nilo occidental en la toma de muestras realizada el pasado 3 de julio en una trampa ubicada a menos de 1,5 kilómetros del casco urbano de la localidad.
De los resultados de la información de vigilancia entomológica de la Consejería y la integración de los datos aportados por la Estación Biológica de Doñana-CSIC, el Servicio de Control de Mosquitos de la Diputación de Huelva y las distintas diputaciones provinciales, con un total actual de 150 trampas instaladas, en cuanto a las densidades de mosquitos observadas en las últimas capturas disponibles, se ha detectado abundancia en los municipios de Los Palacios y Villafranca (zona de Cerro de las Cigüeñas), La Puebla del Río (zona de Dehesa de Abajo, Cañada de los Pájaros y Brazo del Este y núcleo urbano), Coria del Río, Benacazón, Almensilla, Isla Mayor, Palomares del Río y Bollullos de la Mitación.
Nivel elevado en el municipio de La Luisiana y nivel moderado en los municipios de Barbate, Huelva (zona de Calatilla), Gerena, el Viso del Alcor, Villamanrique de la Condesa y La Puebla de los Infantes. El resto de las trampas dispuestas en el territorio aportan valores con presencia baja.
ACTUALIZACIÓN DEL PROGRAMA DE VIGILANCIA
La Consejería de Salud y Consumo aprobó el pasado febrero la actualización del Programa de Vigilancia y Control Integral de Vectores de la Fiebre del Nilo Occidental para la temporada 2025. Este programa establece que todos los municipios de Andalucía están incluidos en algún nivel de riesgo y, por tanto, todos tienen una necesidad de control del mosquito ya que ningún municipio está exento de riesgo.
Los niveles de riesgo se han reducido a tres (bajo, medio y alto) para facilitar su comprensión por parte de todos los implicados, incluida la población, así como las medidas de prevención y control asociadas a cada nivel.
Actualmente, se encuentran en riesgo alto dos municipios de Almería; 16 municipios en la provincia de Cádiz, once en Córdoba, cuatro en Granada, 15 en Huelva, siete en Jaén, nueve en Málaga y 41 en Sevilla.
En cuanto a las competencias de cada administración la Ley de Salud Pública de 2011 establece que la evaluación, gestión y comunicación de los riesgos para la salud de la población asociados a las plagas urbanas compete a la Junta de Andalucía, mientras que los tratamientos de desinsectación se deben efectuar por los servicios oficiales de los municipios y, en su caso, de las diputaciones provinciales, de acuerdo con el decreto de la Consejería de Salud 8/1995, así como la Ley de Autonomía Local de Andalucía, de 2010, atribuye a los ayuntamientos el control de la salubridad de los espacios públicos y, en especial, de las zonas de uso público.
SEGUIMIENTO POR PARTE DE SALUD PÚBLICA
En marzo se comunicó a todos los municipios su nivel de riesgo y los inspectores de Salud Pública (más de 400 desplegados en toda Andalucía) han venido asesorando técnicamente sobre la puesta en marcha de las medidas de vigilancia y control, así como verificando su implementación. Estos agentes han realizado hasta la fecha 1.705 verificaciones en un total de 769 municipios.
En éstas se ha comprobado que en 220 municipios de nivel de riesgo bajo (60%) se aplica un Plan de Control de Mosquitos (PCM) y/o han realizado alguna actuación relacionada con el mismo.
Por otro lado, 183 (50%) de municipios con esos niveles de riesgo adoptan medidas de vigilancia y control adecuadas. En el caso de municipios con niveles de riesgo medio y alto, un total de 327 (78%) disponen de un Plan Municipal de Vigilancia y Control Vectorial (PMVCV) y/o han realizado alguna actuación relacionada con el mismo.
Además, en 282 (67%) de municipios de nivel de riesgo medio o alto se adoptan medidas de vigilancia, control y comunicación adecuadas. En 262 municipios con estos últimos niveles de riesgo se han revisado los imbornales y otros puntos de control.