MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Nicolás Maduro y la Mesa de Unidad Democrática (MUD) --coalición opositora-- retomarán el diálogo que protagonizan para buscar una solución consensuada a la crisis política y económica que sufre Venezuela el 28 y el 29 de enero en Santo Domingo, según ha informado este jueves el presidente dominicano, Danilo Medina.
"A día de hoy, ambas partes de la mesa han confirmado su participación en la siguiente sesión del diálogo, que está prevista para los días 28 y 29 de enero", ha dicho el jefe de Estado en el marco del Foro Económico Mundial de Davos, de acuerdo con un comunicado difundido por la Presidencia de República Dominicana.
Medina no ha querido comentar el estado del diálogo porque se rigen por el principio de que "nada está acordado hasta que todo está acordado y, por tanto, nada de lo negociado debe ser revelado hasta que ambas partes estén listas para anunciar un acuerdo completo".
El líder caribeño se ha mostrado convencido de que "el diálogo es la mejor solución para Venezuela y su gente" y ha instado a "dejar atrás la polarización, los intereses o las inclinaciones particulares y a pensar en una sola cosa: los millones de hombres y mujeres, jóvenes y, sobre todo, niños que merecen un futuro en paz".
Además, ha defendido que "ante mayores dificultades el diálogo se hace aún más urgente" y por eso ha reclamado que "más voces de la comunidad internacional" lo apoyen "sin abogar por una agenda propia ni esperar rédito político". "Nuestra responsabilidad como líderes no es tomar posiciones, sino buscar soluciones", ha sostenido.
En este sentido, ha recalcado que la neutralidad de República Dominicana como país anfitrión. El país "no ha emitido ni emitirá ningún juicio de valoración acerca de lo que está ocurriendo en Venezuela porque entendemos que no nos corresponde", ha recalcado".
NUEVO DIÁLOGO
Las partes debían haberse reunido en Santo Domingo la semana pasada pero la MUD canceló la cita en el último momento exigiendo al Gobierno que mostrara "un compromiso serio" a través de cesiones que permitan crear "las condiciones mínimas" para avanzar hacia la solución de la crisis en Venezuela.
El detonante fueron unas declaraciones del ministro de Interior, Justicia y Paz, Néstor Reverol, en las que dijo que la oposición delató al ex policía Óscar Pérez, que se convirtió en el hombre más buscado de Venezuela el 27 de junio, cuando robó un helicóptero de la Policía y atacó el Tribunal Supremo de Justicia y la sede de dicho Ministerio. El 15 de enero fue localizado en una localidad caraqueña y murió en un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad.
El jefe negociador del Gobierno, Jorge Rodríguez, corrigió dichas palabras, aclarando que la delegación de la MUD no había facilitado ninguna información sobre Pérez, y los ministros de Exteriores de los seis países que ejercen de mediadores --Chile, México, Paraguay, Bolivia, Nicaragua y San Vicente y Granadinas-- se pusieron a trabajar en una nueva fecha para la siguiente ronda de conversaciones.
Este diálogo, que comenzó el 1 de diciembre, da continuidad a innumerables intentos en los últimos año y tiene como objetivo principal pactar las condiciones para que se puedan celebrar unas elecciones presidenciales que sean creíbles para las partes.
Sin embargo, la Asamblea Constituyente --órgano que ni la MUD ni la comunidad internacional reconocen-- ha anunciado que las votaciones al Palacio de Miraflores tendrán lugar antes del 30 de abril, lo que deja muy poco espacio a la negociación y a que la coalición opositora solucione sus cuitas internas.