BUENOS AIRES, 4 jun, 4 Jun. (Reuters/EP) -
- Los agricultores de Argentina dicen que a fin de junio incrementarán las ventas de la soja recién recolectada ya que necesitan pesos para cancelar pagos de créditos de producción, lo que detendrá temporalmente su tendencia a acopiar el grano.
Sin embargo, una vez que cancelen sus préstamos, probablemente vuelvan a recurrir a la oleaginosa como una forma de cobertura contra las elevadas tasas de inflación que sufre el país sudamericano, el principal exportador internacional de aceite y harina de soja.
En medio de un sostenido y alto crecimiento en los precios a consumidor, y tras una devaluación de la moneda local, los productores agropecuarios se volcaron a la oleaginosa como una forma de ahorro, incluso empleando al grano como medio de trueque para adquirir semillas, fertilizantes y hasta camionetas.
"Entre ahora y finales de julio, creemos que los productores dejarán de acopiar y comenzarán a acelerar sus ventas", dijo una fuente involucrada en el comercio de granos ubicada en Buenos Aires, que pidió que su identidad no fuera revelada.
"En agosto, una vez que hayan cancelado sus préstamos, ya no tendrán motivos para vender", agregó.
Según datos oficiales, la tendencia de los agricultores de guardar su cosecha de soja se ha profundizado en los últimos años.
En lo que va de la actual campaña 2013/14 -cuya recolección se acerca a su final- los agricultores de Argentina solo vendieron un 33 por ciento de su producción, por debajo del 36 por ciento registrado al mismo momento el año pasado y del 48 por ciento reportado en el 2012.
"Sin embargo, debería haber un incremento en la oferta de soja en la segunda mitad de junio", dijo Pablo Adreani, director de la consultora AgriPAC.
Productores tuvieron que pedir un volumen de créditos superior al registrado en la temporada 2012/13 debido a la fuerte alza en los precios a consumidor que ha hecho subir los costos de siembra.
La cancelación de préstamos en Argentina, la tercera economía de Latinoamérica y el tercer proveedor mundial de porotos de soja, se concentran en diciembre y mediados de año.
"Una vez que esos pagos son realizados, los productores retienen toda la soja que pueden porque aún hay mucha incertidumbre con respecto a la inflación", dijo Santiago del Solar, un productor del norte de la provincia de Buenos Aires.
Argentina espera una cosecha de soja récord de 55 millones de toneladas esta temporada.
El Ministerio de Agricultura dijo el viernes que el 78 por ciento de los 20,3 millones de hectáreas sembrados con soja 2013/14 fueron recolectados, desde el 94 por ciento registrado a similar fecha el año pasado, debido a lluvias excesivas que han dificultado el acceso de cosechadoras a los campos.
De acuerdo a Adreani, hasta el miércoles ese número habría ascendido a un 87 por ciento gracias a condiciones secas entre el fin del semana y el martes que facilitaron el trabajo rural.
Los beneficios para el sector generados por la devaluación en enero del 18 por ciento del peso local contra el dólar estadounidense ya fueron consumidos por una inflación que analistas privados estiman en un 30 por ciento anual.
Mientras tanto, se espera que la tasa de cambio entre el peso y el dólar, actualmente de 8,1 unidades locales por cada dólar, continúe cayendo.
Otro brusco descenso en la cotización de la moneda argentina motivaría a los agricultores a vender su mercadería, ya que estos operan con pesos, pero venden su oleaginosa en dólares.