Actualizado 14/07/2017 08:35

Francisco de Miranda, 'El Americano más Universal'

Retrato de Francisco de Miranda por Martin Tovar y Tovar
Retrato de Francisco de Miranda por Martin Tovar y Tovar - WIKIPEDIA
Cenotafio Cuadro

   CARACAS, 14 Jul. (Notimérica) -

   Francisco de Mirando fue el vivo ejemplo de hombre ilustrado: formado en todas las ramas del saber, dominador de varios idiomas y estudioso durante toda la vida. Participó, además, en los procesos independentistas más importantes de la historia. Sus ideas revolucionarias le alzaron a la gloria, aunque quizás, esas mismas ideas también hicieron que terminara sus días en la cárcel, en la miseria absoluta, el 14 de julio de 1816.

   Sus orígenes, aunque acomodados, no fueron fáciles. Hijo de un mestizo canario y una caraqueña blanca, el color de piel de su madre posibilitó que pudiera ascender socialmente. Con el objetivo de que Miranda y sus ocho hermanos tuvieran una vida mejor, sus padres les animaron a estudiar en la universidad.

   Se formó como humanista, estudiando latín, leyendo a los filósofos griegos y la gramática de Antonio Nebrija. Sin embargo, no descuidó las matemáticas ni la física. Tuvo que abandonar la Universidad de Caracas debido al ascenso de su padre. Su nuevo puesto le ganó las envidias y el odio de los mantuanos, la aristocracia local que les criticaba por su impureza de sangre.

   La familia se trasladó a la capital de España, donde Miranda siguió estudiando con todas las oportunidades que le daba Madrid. Aprendió música, a tocar la flauta, así como geografía, inglés y francés. Buscando nuevos caminos, se enroló en el ejército español, siendo destinado a Melilla y Argelia.

REVOLUCIÓN AMERICANA Y FRANCESA

   Los intereses europeos en Norteamérica hicieron que participara en diversas campañas de la Independencia de Estados Unidos (1775-1783). Destaca su participación en la Batalla de Pensacola, la cual fue ganada por su gran conocimiento del terreno. Así, también fue esencial su papel en la capitulación de Bahamas.

   Su carácter fuerte y sus ideas revolucionarias entraron pronto en contraste con sus superiores, lo que le valió diversos enfrentamientos y la persecución de la Iglesia Católica y la Inquisición. Para no ser juzgado huyó al territorio que acababa de liberar.

Cuadro

   No se quedó en Estados Unidos, sino que comenzó un periplo de varios años por toda Europa. Recorrió desde el Imperio Otomano, actual Turquía, hasta Bélgica, codeándose con la nobleza. Debido a su fama e influencias, conoció al rey Federico II de Prusia y la zarina Catalina II 'La Grande' de Rusia.

   A partir de 1791 tomó parte en la Revolución Francesa (1789-1799) del lado de los girondinos, la aristocracia local. Luchó en la batalla de Valmy, la más importante de este periodo, y debido a ello fue perseguido por el Tribunal Revolucionario. Su defensa corrió a cargo del abogado de la mismísima reina María Antonieta, que consiguió su absolución.

VUELTA Y INDEPENDENCIA VENEZOLANA

   Sin muchos lugares más a donde ir, volvió a América. Tenía la intención de fundar un imperio, desde el Río Mississipi hasta Tierra de Fuego, al cual nombraría Colombia en honor a Cristóbal Colón. Debido a su amistad con Simón Bolívar, se inmiscuyó en el proceso de independencia de Venezuela.

   Después de negociar con los países europeos, en su vuelta a Caracas fue nombrado Dictador Plenipotenciario, siendo uno de los que firmó el Acta de Independencia en 1811. Incapaz de defenderse de los contraataques realistas y con la mala situación después del terremoto de 1812, Miranda firmó las capitulaciones de San Mateo temiendo una basta derrota.

Cenotafio

   Bolívar tomó la sumisión como una traición, apresándole y con la intención de fusilarle. Sin embargo, terminó entregándole a los realistas. Estos le mandaron a la cárcel de las Cuatro Torres en Cádiz. Tras años de internamiento y un intento de fuga a Gibraltar, sufrió un ataque cerebrovascular y murió el 14 de julio de 1816, hace hoy 201 años.

   Fue enterrado en una fosa común, ya que no fue hasta años después cuando se comenzó a resaltar su figura. Así, su cenotafio del Panteón Nacional de Venezuela reza: "Venezuela llora por el dolor de no haber podido hallar los restos del general Miranda". Cientos de calles, avenidas y plazas llevan su nombre, honrando al conocido como 'El Americano más Universal'.