Actualizado 30/03/2015 15:58

Mujica: 'El último héroe', un documental sobre un político poco convencional

  José Mujica
Foto: ANDRES STAPFF / REUTERS

MONTEVIDEO, 30 Mar. (Notimérica) -

   El ya ex presidente de Uruguay, José Mujica, conocido como 'Pepe', dejó la Presidencia del país a su sucesor en el cargo, Tabaré Vázquez, el pasado domingo 1 de marzo. El que fuera guerrillero convertido en político, es un hombre que "hace comida para sus perros", "se sube a su tractor y trabaja su tierra" y "se dedica científicamente a las flores", según le retrata el director de cine Emir Kusturica en su último documental, 'El último héroe'.

   Mujica impresionó a todo el mundo con su vida austera y sus alegatos contra el consumismo. A pesar de convertirse en presidente, no cambió sus costumbres y siguió conduciendo su mismo escarabajo antiguo. La figura de Mujica impresionó tanto a Kusturica, dos veces ganador de la Palma de Oro en el festival de Cannes, que decidió trasladarse a Uruguay en 2013 para rodar un documental sobre la vida del entonces presidente.

   "No existe en el mundo, en los países con las democracias más sólidas que yo conozca, un país en el cual, cuando un presidente deja su cargo, la gente se acerca para decirle cuánto aprecia lo que ha hecho por ellos", aseguró Kusturica, según ha publicado el diario uruguayo 'El País'.

   "No estoy hablando de cifras, no estoy diciendo que en cinco años él redujo la pobreza en un 30 por ciento ni muchas otras cosas que podría mencionar en números; estoy hablando de la grandeza de una persona que deja de hacer algo y sigue reflejando esa grandeza y siendo querido", añadió Kusturica, durante la presentación del documental a inicios de marzo, que ya ha acabado de rodarse, pero al que le falta la edición para poder estrenarse.

   El director de cine serbio consideró el caso de Mujica como "único", ya que "los presidentes generalmente terminan en prisión, tratan de huir, tratan de esconderse, se vuelven extremadamente ricos y confirman por qué las personas quieren convertirse en políticos; quieren ser políticos porque quieren ser ricos. En este caso, es lo opuesto".

   Kusturica estaba de gira por Europa junto a la No Smoking Orchestra, su banda de música, cuando escuchó hablar por primera vez de Mujica: "Uno de los gerentes de la gira, que vive en Buenos Aires, me llamó y me dijo 'hay un presidente extraño en un país, vive en su propia casa, maneja un tractor y no quiere recibir salario'. Enseguida le pregunté quién era. Me dijo su nombre y que era en Uruguay y yo dije: bueno, voy para allá".

   "Cuando llegué aquí y lo conocí tuve el sentimiento de estar frente a algo que nunca había visto en mi vida", dijo el director. "Luego leí libros y material sobre él y entendí una cosa: Cuando vienes de otra parte del mundo estás mejor capacitado para sentir la calidad de esa persona, quizá más que lo que un director de cine uruguayo lo podría sentir".

   El documental se basa especialmente en las conversaciones que Kusturica tuvo con Mujica y en lo que pudo documentar de su vida diaria. "Será la historia del tiempo presente y del pasado que lo llevó de ser un guerrillero urbano a un excelente presidente", aseguró el cineasta.

MUJICA, EL EXGUERRILLERO

   La figura del exguerrillero tupamaro de 79 años ha traspasado las fronteras de su país y ha logrado un gran reconocimiento internacional. Buena parte de ello se debe a su carismática figura, siempre cercana, pero también a que su Gobierno ha conseguido récords en reducción de la pobreza y crecimiento del empleo.

   Mujica, que pasó once años encarcelado en duras condiciones durante la dictadura, tuvo "mucho tiempo para pensar", suele decir. Esta terrible época le sirvió para distinguir aquellas cosas imprescindibles en la vida de aquellas que no lo eran.

   Muy crítico con el consumismo, el sistema económico capitalista, la desigualdad y las élites políticas, sin duda lo que diferencia a Mujica de otros presidentes izquierdistas es que predica con el ejemplo. La mayor parte de su sueldo se destina a obras sociales, vive en una humilde 'chocita' de campo, conduce su destartalado coche de toda la vida y usa un teléfono móvil antiguo que sólo sirve para realizar y recibir llamadas.