Publicado 14/04/2014 20:09

ANALISIS-Draghi pone al euro en centro del debate de política del BCE, mercados atentos

Por Paul Carrel y Anirban Nag

FRANCFORT/LONDRES, 14 abr, 14 Abr. (Reuters/EP) -

- Al expresar preocupación sobre la fortaleza del euro, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, intenta contener a la moneda y evitar tomar nuevas medidas para abordar la baja inflación, pero los mercados financieros pondrán a prueba su determinación.

Draghi identificó el fin de semana la fortaleza de la moneda como un posible generador para que el BCE expanda su política monetaria, asegurando en Washington que "el fortalecimiento del tipo de cambio requeriría más políticas monetarias acomodaticias".

Algunos analistas afirman que si el euro sube mucho más abriría el camino para una nueva significativa tendencia alcista debido a la falta de resistencia técnica. El resultado sería una presión aún más bajista para la inflación de la zona euro, que en un 0,5 por ciento está muy lejos del objetivo del BCE de justo por debajo de un 2 por ciento en el mediano plazo.

El euro ha ganado casi un 5,5 por ciento contra el dólar en el último año a alrededor de 1,38 dólares. Esta fortaleza hace que las importaciones sean más baratas, reduciendo los precios que los consumidores pagan por los bienes.

Aunque lo anterior puede darle a las familias más poder de compra en el corto plazo, el BCE quiere evitar una caída en las expectativas de inflación.

Tal escenario podría resultar en acuerdos salariales más bajos y reducir la demanda económica a medida que las familias retrasan su compras, con la pesadilla de transformarse en una espiral de precios a la baja similar a la experiencia japonesa de una deflación periódica desde la década de 1990.

El énfasis de Draghi sobre la fortaleza del euro resalta el impacto que el BCE cree que el tipo de cambio tiene sobre la inflación, y centra la atención en la próxima serie de proyecciones económicas del propio banco central.

En marzo, los pronósticos desde el BCE apenas vieron la inflación retornando al nivel objetivo para finales del 2016 y asumió un tipo de cambio de 1,36 dólares desde este año hasta entonces. Esos pronósticos serán actualizados por el BCE en una reunión de política monetaria del 5 de junio.

"Si cambian la suposición a 1,40 dólares eso podría recortar 0,1 puntos porcentuales de las expectativas de inflación y acercar las medidas adicionales", dijo Christian Schulz economista del banco Berenberg.

"El 1,40 dólares es un nivel psicológico que fortalecerá los pedidos para que el BCE haga más", agregó.

Draghi fue cauto el fin de semana para no indicar un nivel al cual el BCE tomaría nuevas medidas. Al señalar el tipo de cambio y resaltar su disposición a actuar de ser necesario, Draghi y sus colegas han contenido el avance del euro por ahora.

El lunes, el euro retrocedía levemente desde niveles cercanos a los máximos de este año, operando justo por sobre los 1,38 dólares. La moneda aún se ubica cerca de la zona media del rango en que se ha mantenido desde finales del 2003, muy lejos de sus máximos posteriores al 2008 de 1,60 dólares.

ACCION, NO PALABRAS

Al mantener contenido al euro, Draghi podría aliviar las presiones a la baja de precios hasta que se inicie una recuperación económica más sólida.

Una lectura de inflación más fuerte en abril, a conocerse el 30 de este mes, podría aliviar las presiones para actuar. Pero el BCE debe ser cauteloso de no entrar en una disputa con los mercados si la inflación permanece baja y no toma medidas.

Operadores y estrategas dicen que si el euro avanza por sobre los 1,40 dólares, fácilmente podría alcanzar los 1,45 ya que existe muy poca resistencia técnica entre los 1,40 y 1,45 dólares.

"El BCE se da cuenta de esto y quiere mantener al euro por debajo de 1,40 dólares al comentar sobre la situación", dijo un operador senior en Londres. "Pero el mercado pondrá a prueba la determinación del BCE al hacerlo subir (al euro) para ver si tomará medidas. El euro necesita acción, no solo palabras", agregó.