Publicado 12/06/2020 13:57

Argentina y sus acreedores concluyen este viernes las negociaciones por la reestructuración de deuda

El presidente de Argentina, Alberto Fernández
El presidente de Argentina, Alberto Fernández - ESTEBAN COLLAZO / PRESIDENCIA DE ARGENTINA

MADRID, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

El plazo de negociación entre Argentina y los acreedores privados por la reestructuración de la deuda del país concluye este viernes 12 de junio a las 17,00 horas de Nueva York, después de que el Ejecutivo argentino aplazara la anterior fecha límite del 2 de junio, con posturas más cercanas entre ambas parte pero aún sin un acuerdo oficial sobre la mesa.

El pasado jueves, el presidente del país, Alberto Fernández, afirmó que Argentina mejoraría su oferta de deuda inicial, por la que se planteaba un canje de 66.238 millones de dólares (60.964 millones de euros) que comenzaría a pagarse a partir de 2023, con una quita del 62% en intereses en dólares y de 3.600 millones de dólares (3.313 millones de euros) de capital, pero sin poner en riesgo la sostenibilidad de la deuda ni de la economía argentina.

En concreto, el mandatario indicó que no quiere lograr un acuerdo de deuda que sacrifique a los sectores más vulnerables. "No quiero que tengamos una deuda que se pueda pagar y sacrifiquemos a los que menos tienen", señaló. Tras el anuncio, Fernández se reunió con el ministro de Economía, Martín Guzmán, que es el negociador de Argentina en el proceso, para ver el "detalle final" de la nueva propuesta del Ejecutivo.

Las posturas entre las partes por un acuerdo están cerca. Según el diario económico argentino 'Ámbito', la propuesta que podría presentar el Ejecutivo equivaldría a un 52% del Valor Presente Neto (VPN) de varios cupones del canje, mientras que la última oferta de los bonistas apuntaba a un 55%, lo que equivale a una diferencia de unos 3.000 y 4.000 millones de dólares (2.653 y 3.538 millones de euros).

El pasado 22 de mayo, Argentina entró en 'default' selectivo al no cumplir con el cumplimiento de tres bonos globales por 503 millones de dólares (444 millones de euros). Pese a esto, las conversaciones siguieron activas entre los bonistas y el Gobierno.

Hace unos días, los grupos de acreedores Ad Hoc Bondholder, en el que se encuentran fondos como BlackRock, T Rowe o Fidelity, y Exchange Bondholder Group, lanzaron una contraoferta en la que mostraban "los esfuerzos de colaboración". En concreto, los acreedores proponían un acuerdo conjunto que suponía el alivio en el flujo de unos 36.000 millones de dólares (32.345 millones de euros) durante los próximos nueve años.

Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI) afirmó que la oferta de deuda del país era "consistente" para poder pagar y mantener la sostenibilidad de la deuda al mismo tiempo. Además, añadió que el país disponía de "espacio limitado" para incrementar su pago a los acreedores privados.

Una vez concluido el acuerdo para la reestructuración de la deuda del país, Argentina deberá afrontar el pago de 56.300 millones de dólares (50.581 millones de euros) que el Fondo Monetario Internacional (FMI) concedió al anterior Gobierno de Mauricio Macri en 2018.