Actualizado 08/01/2010 04:22

Argentina.- La presidenta argentina afirma que no le gustó tener que expulsar al presidente del Banco Central


BUENOS AIRES, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -

La presidenta argentina, Cristina Fernández, se refirió este jueves escuetamente a la inesperada destitución del presidente del Banco Central, Martín Redrado, para alegar que para el Gobierno no fue fácil adoptar esta decisión. "No me gustó tomar la medida", explicó.

Durante un acto en la localidad de La Matanza, la mandataria trató de eludir las preguntas de los periodistas horas después de conocerse un decreto Ley que implicaba el despido Redrado por negarse a entregar 6.569 millones de dólares (4.540 millones de euros) de las reservas para pagar los vencimientos de deuda de este año.

"No me gustó tomar la medida", terminó respondiendo, y añadió que "el Banco Central no es unipersonal, porque es un organismo colegiado y tiene que funcionar todo su directorio", según informó 'Clarín'.

Fernández indicó que, hasta que un nuevo presidente asuma el mando del organismo regulador, seguirá "en ejercicio" el actual vicepresidente, Miguel Pesce, uno de los funcionarios críticos con Redrado.

El eje de la disputa entre el Gobierno y la entidad monetaria ha sido la creación del Fondo del Bicentenario con el que la Presidencia pretende pagar los vencimientos de deuda de 2010 que suma unos 13.000 millones de dólares (9.080 millones de euros), utilizando 4.540 millones de euros de las reservas federales del Tesoro que alcanzan los 17.000 millones de dólares (11.875 millones de euros).