Publicado 07/01/2015 22:09

Atacantes de revista francesa parecen ser combatientes islamistas entrenados

Por Nicholas Vinocur

PARIS, 7 ene, 7 Ene. (Reuters/EP) -

- Los hombres armados vestidos de negro que atacaron el miércoles las oficinas en París de la revista satírica Charlie Hebdo hablaban francés con claridad y actuaban como comandos islamistas entrenados, disparando a sus víctimas en lo que pareció una operación bien preparada.

Si bien la policía aún no atrapa a los atacantes, o explica sus motivos, videos aficionados muestran que al menos uno gritó "Allahu Akbar", "Alá es el más grande" en árabe, y dijo estar "vengando al profeta Mahoma".

Un testigo que estaba en el edificio dijo a medios franceses que uno de los atacantes se identificó como un miembro de al Qaeda.

Expertos en terrorismo dijeron que los encapuchados, que vestían trajes idénticos con cinturones con munición e iban armados con rifles de asalto Kalashnikov, parecían haber llevado a cabo su ataque metódicamente.

"Fue chocante no sólo por su sangre fría, sino también por el modo profesional en que huyeron, tomándose el tiempo para rematar a un policía herido", dijo Jean-Louis Bruguiere, un ex magistrado especializado en contraterrorismo.

Las oficinas de Charlie Hebdo tenían protección policial desde un ataque incendiario en 2011, luego de la publicación de caricaturas del profeta Mahoma.

"Claramente hubo una operación de reconocimiento previo a la operación", dijo Anne Giudicelli, fundadora de la consultora de seguridad TERR(o)RISC. "Encontraron una fisura en el dispositivo de seguridad y escogieron un método que les garantizaba éxito".

Grupos islamistas han hecho públicos videos en semanas recientes advirtiendo a Francia de ataques inminentes por su participación en la campaña de bombardeos en Irak contra militantes del Estado Islámico encabezada por Estados Unidos.

NADA LIBRADO AL AZAR

El ataque comenzó poco después de las 11.30 hora local (1030 GMT) cuando dos hombres armados entraron por la fuerza al edificio en el este de París. Dispararon a un técnico que estaba en el mesón de recepción y abrieron fuego sobre periodistas reunidos para la planificación semanal, dijeron testigos.

Los hombres atacaron a la ilustradora Corinne Rey en la planta baja y le ordenaron que entrara el código para abrir la puerta de la oficina de Charlie Hebdo. "Dijeron que pertenecían a al Qaeda", dijo Rey, quien agregó que claramente hablaban francés.

En el ataque, que duró unos cinco minutos, los agresores, que según un representante sindical policial además llevaban escopetas de repetición, mataron a un oficial de policía dentro de la oficina y a ocho periodistas.

Las víctimas incluyen a tres caricaturistas conocidos por sus seudónimos de trabajo Cabu, Wolinski y Charb. El último era además el director de la publicación. El economista Bernard Maris, un columnista, fue uno de los dos visitantes que también murieron.

Rey, quien se escondió bajo una mesa durante la matanza, dijo que los atacantes llamaron a algunas de sus víctimas por sus nombres.

Según el fiscal de París, Francois Molins, otras 11 personas resultaron heridas, de las cuales cuatro están en condición crítica.

"Todas las víctimas estaban en el piso o sentadas y aquellas gravemente heridas están haciendo su mejor esfuerzo por respirar", dijo el funcionario de servicios de emergencia Patrick Hertgen. "Muchos fueron ejecutados. La mayoría tiene heridas en la cabeza o el torso".

Tras salir a la calle, los atacantes se enfrentaron a tiros con oficiales de la primera patrulla que respondió a la emergencia y con dos policías en bicicleta, antes de disparar repetidas veces a un segundo vehículo policial.

"Lo que fue chocante es lo agrupadas que están las marcas de los disparos en el parabrisas, lo que muestra que controlaban sus armas y sus emociones", dijo a la televisión local Rene-Georges Querry, ex jefe de una unidad antiterrorista de la policía.

Un video aficionado filmado desde un tejado cercano mostró a uno de los atacantes caminando hacia un policía herido, quien había avanzado desde el auto a una acera cercana, y al que le disparó para matarlo sin rodeos.

Los atacantes manejaron hacia el noreste de París. Chocaron con un motociclista antes de abandonar el automóvil en una concurrida plaza y hurtar otro vehículo para escapar en dirección a los suburbios del norte de la ciudad.

Si bien sólo se veía a dos hombres en los videos de la escena del crimen, el motorista dijo que los atacantes eran tres.

Las autoridades han puesto al país en alerta "escarlata", que significa que un ataque es inminente.

Si bien las caras de los pistoleros estaban cubiertas durante el ataque, la policía recogió numerosos casquillos en el lugar y un guante que puede ofrecer evidencia.