Actualizado 12/04/2019 08:52

El Banco Mundial y el FMI se preparan para ayudar a aliviar la crisis humanitaria en Venezuela

La directora del FMI Christine Lagarde
REUTERS / DENIS BALIBOUSE - Archivo

   WASHINGTON, 11 Abr. (EUROPA PRESS)

   El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) han reconocido este jueves su preocupación por el deterioro de la situación humanitaria en Venezuela, revelando que podrían adoptar algunas medidas al respecto, si bien por el momento han rehusado reconocer al líder opositor Juan Guaidó como "presidente encargado" del país.

   El nuevo jefe del Banco Mundial, David Malpass, que tomó posesión del cargo el pasado martes, ha declarado en una rueda de prensa que los acontecimientos en la nación caribeña son "motivo de profunda preocupación" para el organismo multilateral.

   "El Banco Mundial se implicará profundamente" para aliviar la crisis humanitaria, ha anunciado. "Estamos preparándonos para ello, pero la situación sobre el terreno aún es problemática", ha apostillado, según informa la agencia de noticias Reuters.

   Por su parte, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, ha dado un paso más y ha revelado que el ente financiero sopesa reconocer a Guaidó como mandatario interino, si bien "depende de los estados miembro", un total de 189.

   Lagarde, citada por la agencia de noticias alemana DPA durante la reunión de primavera del FMI, también ha trasladado la preocupación del mismo por la crisis económica y humanitaria, y ha indicado que se está preparado para actuar lo antes posible.

   La crisis venezolana se agudizó el 10 de enero a raíz de la decisión de Nicolás Maduro de iniciar un segundo mandato que no reconocen ni la oposición ni gran parte de la comunidad internacional por considerar que las elecciones presidenciales del 20 de mayo fueron un fraude.

   El 23 de enero, Guaidó se autoproclamó "presidente encargado" de Venezuela obteniendo el reconocimiento de buena parte de la comunidad internacional, incluidos Estados Unidos, la mayoría de países latinoamericanos y numerosos europeos, para que gestione una transición pacífica que culmine con nuevas elecciones.