Actualizado 24/10/2013 21:58

Brasil defiende modelo producción compartida para subastas de campos subsal


BRASILIA, 24 oct, 24 Oct. (Reuters/EP) -

- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, defendió el jueves el modelo de producción compartida adoptado para adjudicar subastas de campos petroleros subsal y elogió el resultado de la venta del gigantesco bloque Libra.

La venta por los derechos de explotación de Libra -el mayor depósito de crudo jamás descubierto en Brasil- realizada el lunes sólo tuvo un consorcio competidor, pero el Gobierno de todas formas celebró el resultado del proceso porque grandes compañías de energía participarán en el proyecto.

El consorcio ganador está encabezado por la estatal brasileña Petrobras, con un 40 por ciento de participación, e incluye a la compañía anglo-holandesa Shell y a la francesa Total, con un 20 por ciento cada una. Las petroleras chinas CNPC y CNOOC completan el grupo con un 10 por ciento cada una.

Tras el resultado de la subasta, Rousseff ha descartado cualquier cambio en las reglas.

Según la mandataria, el modelo de concesión único sólo debe ser usado cuando existe un riesgo mayor para los inversores, a diferencia de lo que ocurre con el yacimiento aguas adentro de Libra, donde hay certeza sobre la cantidad y la calidad del petróleo.

"El modelo de concesión único es el que implica demasiado riesgo para extraer petróleo", argumentó, y agregó que en el caso de Libra el riesgo de exploración "es pequeño".

"Por eso se cambió a un modelo de producción compartida. No se cambió sólo porque alguien lo decidió de la noche a la mañana", declaró Rousseff durante un discurso.

Críticos sostienen que el requisito de usar proveedores locales para la compra de maquinaria y equipo, la participación obligatoria del 30 por ciento de Petrobras y los amplios poderes de Pré-Sal Petróleo (PPSA), la organización estatal creada para administrar los bloques son obstáculos para atraer a inversores.

Libra contiene un estimado de 8.000 millones a 12.000 millones de barriles de crudo recuperable, según el regulador de energía de Brasil y la compañía de certificación petrolera Degolyer & MacNaughton (D&G).

En términos de proyecciones, la explotación del depósito podría casi duplicar las reservas de crudo de Brasil o tener suficiente petróleo para abastecer la demanda mundial hasta por 19 semanas.