Actualizado 09/12/2015 15:49

CAF se compromete a destinar un 30% de sus proyectos a financiación verde

   MADRID, 9 Dic. (Notimérica) -

   Bajo el marco de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21), el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) se ha comprometido a destinar un 30 por ciento de sus proyectos a financiamiento verde para 2020.

   "El 24 por ciento de las aprobaciones de CAF en 2014 correspondieron a financiamiento verde. Para 2020, nos proponemos alcanzar el 30 por ciento, con el fin de apoyar a los países de América Latina en el proceso de transición a economías bajas en carbono y resilientes al clima", ha explicado el presidente ejecutivo de CAF, Enrique García.

   De acuerdo con un comunicado oficial, García ha apostado por las inversiones verdes y su rentabilidad en las economías nacionales: "Está demostrado que las inversiones 'verdes' aumentan la competitividad y la productividad de los países, son rentables y pueden incluso suponer un impulso de las economías nacionales, con la oportunidad de generar más y mejores empleos".

   Asimismo, CAF ha aportado cerca de 1.500 millones de dólares en los últimos 10 años. Y sólo en 2014, el financiamiento verde de la institución ascendió a 2.810 millones de dólares, representando uno de cada cuatro del total de las aprobaciones totales para ese año.

   Se trata de un aspecto importante en el contexto global de bajo crecimiento. América Latina sólo es responsable del 12,5 por ciento de las emisiones mundiales, pero su sector agrario perdió 11.000 millones de dólares entre 2003 y 2013 debido a los desastres naturales, según reportó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

   Por ello, es necesario tomar medidas correctivas para evitar impactos negativos fruto del aumento de la temperatura global en regiones que, como la Patagonia, Brasil central, el Caribe y Centroamérica, podrían sufrir una reducción de lluvias y ver incrementadas las sequías en sus territorios.

   Si dicho fenómeno se produjera la producción agroindustrial mermaría y la capacidad productiva de América Latina se reduciría considerablemente. Del mismo modo, el aumento de ciclones tropicales y del nivel de los océanos pondrían en riesgo a poblaciones instaladas en primera línea del mar.

   Se calcula que el financiamiento necesario para que se produzca una transición hacia economías de bajas enemisiones y resilientes al clima asciende a unos 1.000 billones de dólares al año hasta 2050.

   Por lo tanto, será imprescindible el compromiso de todos los actores, desde gobiernos y sector privado, hasta organismos multilaterales y sociedad civil para implementar este nuevo modelo.

   Estos y otros temas se abordarán hoy en el Día CAF, dentro de los encuentros que se llevan a cabo en la COP21. Representantes de organizaciones medioambientales, bancos de desarrollo, sector privado y representantes públicos se reunirán para discutir sobre financiamiento verde, proyectos de adaptación y ciudades resilientes al cambio climático, entre otros temas.