Por Adriana Barrera
MEXICO DF (Reuters/EP) - El presidente de México, Felipe Calderón, anunció el miércoles un plan de reformas estructurales urgentes, entre ellas una económica para enfrentar la peor recesión del país en décadas y la severa caída en los ingresos del Estado.
Durante un discurso con motivo de su tercer informe de Gobierno, Calderón pidió el apoyo del Congreso -que esta semana inició sesiones estrenando una nueva Cámara de Diputados en la que domina la oposición- para aprobar sus proyectos.
"Propongo también una reforma económica de fondo que transforme nuestra economía para hacerla más competitiva, que permita acelerar el crecimiento y la generación de empleos y que lo haga además de manera sostenida", dijo Calderón en el Palacio Nacional.
Calderón, que asumió en diciembre del 2006, enviará al Legislativo a más tardar el próximo martes un proyecto de reforma fiscal junto con el presupuesto del 2010, según han dicho funcionarios.
El Gobierno necesita implementar reformas para amortiguar la crisis, que arrastraría la economía a una caída de hasta el 7.5 por ciento este año según el banco central.
México estima que tendrá una brecha fiscal de 300,000 millones de pesos (unos 23,000 millones de dólares) en sus finanzas públicas del 2010, porque no contará con los ingresos no recurrentes -como ganancias cambiarias, coberturas petroleras y fondos de estabilización- que este año le permitieron compensar la caída en ingresos petroleros y tributarios.
LOS RECURSOS SE AGOTAN
El Gobierno tendrá este año 480,000 millones de pesos menos de ingresos que lo presupuestado por un combinación de una menor producción petrolera, precios del crudo más bajos, menor recaudación tributaria y una caída en exportaciones de manufacturas hacia Estados Unidos, el mayor socio comercial de México.
"Porque el tiempo y los recursos se nos agotan, porque las necesidades de la población son cada vez más apremiantes, hoy cambiar de fondo, no sólo es la mejor, sino la única alternativa", dijo Calderón.
Otra de las iniciativas que mencionó el mandatario apunta a profundizar una reforma previa del sector energético para frenar la caída en la producción de crudo, cuyas exportaciones generan más de un tercio de los ingresos del Gobierno.
"El agotamiento de los recursos y de las reservas de petróleo nos obliga a ir más a fondo y mucho más rápido", afirmó Calderón.
Legisladores oficialistas han dicho que insistirán en el Congreso para que empresas privadas se encarguen de construir refinerías y operarlas, una medida que la oposición rechazó.
Además, dijo que propondrá una reforma profunda en las finanzas públicas, que incluye planes de austeridad dentro del Gobierno para reducir el gasto, otra para el mercado laboral para facilitar el acceso al empleo y otra en el sector de telecomunicaciones para fomentar la competencia.
El pedido de Calderón para que el Congreso apoye sus reformas ocurre después de que el gobernante Partido Acción Nacional (PAN) perdió decenas de bancas en las elecciones de julio para renovar la cámara baja, y el opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI) es ahora la primera fuerza.
La presidenta del PRI, Beatriz Paredes, dijo que es buena señal de Calderón el llamado a trabajar en equipo.
"El informe en general y particularmente el mensaje al abrir una convocatoria amplia incluso y expresar disposición al diálogo es un paso adelante", dijo Paredes a reporteros.