Actualizado 31/07/2018 16:49

Carlos Slim se quedará para siempre en FCC

 Carlos Slim
REUTERS / CARLOS JASSO - Archivo

   El grupo abre una etapa de crecimiento con posible vuelta al dividendo y reactivando los negocios inmobiliario, de concesiones y renovables

   MADRID, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -

   El magnate mexicano Carlos Slim ha asegurado que se quedará para siempre en el capital de FCC, grupo constructor español en el que desembarcó y 'rescató' en 2014, y que actualmente está ya preparado para volver a crecer y pagar dividendo tras el proceso de ajuste y saneamiento acometido desde entonces.

   "Me quedaré un buen tiempo, cuanto menos toda mi vida, en FCC. La participación es permanente", aseguró el empresario en su primera intervención pública sobre la compañía también participada y en su día controlada por Esther Koplowitz.

   Slim presidió el primer 'Investor Day' de FCC para dar por terminada la fase de ajuste y reestructuración que el grupo ha implementado desde 2015 y proclamar el inicio de una nueva etapa de crecimiento y expansión.

   "FCC está en una situación excepcional, tanto en lo financiero, como en lo operativo y administrativo. Tiene una posición financiera sana y de fortaleza y está en condiciones óptimas de abordar su desarrollo", proclamó el magnate en su intervención, en la que estuvo flanqueado por Koplowitz y su hija y presidenta de FCC Esther Alcocer Koplowitz.

   En la estrategia de FCC para esta nueva etapa de expansión sobresale la apuesta por la construcción de viviendas, tanto a través del grupo como de la filial inmobiliaria Realia, aprovechando el 'boom' del sector en el país y la cartera de suelos con que cuentan las dos empresas.

   Asimismo, reactivará los negocios de construcción de infraestructuras en concesión y de energías renovables, actividades con las que cuenta una cartera de activos y que estos años tuvo en 'hibernación'. Se trata de diez concesiones y una decena de parques eólicos y fotovoltaicos.

   A ello se sumará el crecimiento, fundamentalmente en el exterior, de sus actuales negocios de construcción, servicios medioambientales e infraestructuras y gestión de agua, en este caso de la mano de IFM, el fondo australiano al que ha vendido el 49% de Aqualia, filial del ramo y 'joya de la corona' del grupo.

VUELTA AL DIVIDENDO, ÚLTIMO HITO PENDIENTE.

   Precisamente, esta operación permitirá a FCC cumplir el último hito que le resta para cerrar su reestructuración, la recuperación del reparto de dividendo que tiene suspendido desde 2013.

   La liquidación de deuda con parte de los 1.028 millones que le reportará esta venta permitirá a FCC cumplir con la principal condición que le pusieron los bancos para recuperar el pago al accionista, la de reducir su pasivo a un importe inferior a cuatro veces su Ebitda.

   "Dada la actual sólida posición financiera de la empresa, no sería raro pensar en dividendo el próximo año", apuntó Slim al respecto, que emplazó la decisión a la junta de accionistas del ejercicio 2019 y abrió la posibilidad a efectuar parte del pago en acciones.

   En ese caso, Slim cobraría por vez primera un dividendo de FCC desde que en 2014 desembarcó en la empresa, en la que ha inyectado el grueso de los 1.700 millones de euros que han supuesto las dos ampliaciones de capital realizadas por la compañía en estos años para sanearse.

   En el caso de Esther Koplowitz, le permitirá volver a destinarlo a cubrir el servicio de la deuda que tiene asociada a la participación del 20% que mantiene en FCC, pasivo actualmente toda él en manos de Slim.

   En su intervención, este empresario mexicano enfatizó el camino de ajuste y reestructuración realizado por la compañía en estos años, sobre todo en lo que al recorte de la deuda y su coste ser refiere.

   En concreto, remarcó cómo en este periodo el grupo ha reducido a la mitad su pasivo, desde los 8.250 millones que soportaba en 2014 hasta los 4.000 millones actuales, si bien aún pendientes de reducir con lo que se obtenga de Aqualia.

   De igual forma, la empresa ha logrado disminuir un 81% el coste de esta dueda, que ahora exige unos 90 millones de euros anuales, frente a los 478 millones que le suponía hace cuatro años.

   En paralelo, FCC ha logrado superar este año los 'números rojos' con los que cerró los cinco últimos ejercicios, de forma que ha saldado la primera de este año con una ganancia de 151 millones.

   Slim subrayó el hecho de que ha aplicado a la constructora española los principios que rigen la gestión de su corporación Carso, especialmente en lo que a la simplificación de estructuras y organización se refiere.

"AGRADECIMIENTO" DE KOPLOWITZ.

   Con todo, el magnate, una de las primeras fortunas del mundo, aseveró que FCC ya entra en una época de "vacas gordas". "Hasta ahora no nos tocaron muchas vacas gordas, pero ya están empezando a tocarnos", indicó al respecto.

   De su lado, la presidenta de la compañía, Esther Alcocer Koplowitz, en una breve exposición previa a la de Slim, manifestó el "más profundo agradecimiento" del grupo al empresario, "quien en momentos muy difíciles para la empresa, que incluso amenazaron su supervivencia, apostó por ella con una inversión definitiva para enderezar su rumbo".

   "Gracias a su intervención, hoy FCC vive una clara etapa de recuperación", aseguró Alcocer Koplowitz. "Nuestra empresa le estará siempre agradecida y actuará con éxito suficiente para justificar con creces el esfuerzo inversor realizado", aseveró.