Publicado 13/01/2015 14:24

China enfrenta mayor desafío fiscal desde 1981: Deutsche Bank

Por Kevin Yao

PEKÍN, 13 ene, 13 Ene. (Reuters/EP) -

- El crecimiento de los ingresos fiscales de China caerá en 2015 a un mínimo en tres décadas, dijo Deutsche Bank en un reporte, complicando los esfuerzos de los funcionarios para contener la expansión fuerte de las deudas de los gobiernos locales sin afectar a la economía en general.

Los ingresos fiscales totales probablemente crecerán solo 1 por ciento anual en 2015, el menor ritmo desde 1981, predijo Deutsche Bank, y proyectó que los ingresos de los gobiernos locales bajen 2 por ciento, que sería la primera contracción desde 1994.

Las ventas de tierras, que explican algo más de un tercio de los ingresos de los gobiernos locales, podrían descender 20 por ciento, dijo el informe.

Los gobiernos locales, que en general tienen prohibido tomar créditos directamente o emitir bonos, han acumulado unos 3 billones de dólares en deudas a través de unos poco transparentes vehículos de financiación de gobiernos locales (VFGL).

La mayor parte de los fondos se invirtieron en proyectos cuestionables de infraestructura y bienes raíces.

Con una economía en desaceleración, en particular por las bajas de los precios de las tierras, que golpea a los ingresos, los economistas de Deutsche Bank Zhiwei Zhang y Andrey Shi ven una crisis próxima.

"China probablemente enfrentará el peor desafío fiscal desde 1981", escribieron en un análisis publicado el lunes.

"Este es el riesgo más importante para la economía y no está bien reconocido en el mercado".

El gobierno debe encontrar la manera para que los gobiernos locales consigan los muy necesarios fondos y financien servicios sociales clave mientras mantienen la disciplina del gasto, un difícil acto de equilibrismo económico y político.

El crecimiento económico anual de China probablemente se moderó al 7,2 por ciento en el cuarto trimestre, que sería el más débil desde el peor momento de la crisis global, mostró un sondeo de Reuters.

Pero el ritmo de endeudamiento sigue relativamente alto pese a varias rondas de un alivio monetario muy cauteloso.

"La economía enfrenta presiones a la baja relativamente grandes y la resistencia local (a las reformas) es fuerte", dijo un influyente economista involucrado en revisar la ley de presupuestos, hablando bajo condición de anonimato.

"Los funcionarios locales han estado quejándose de sus cargas de deuda y gritarán todavía más fuerte si se les resta poder para financiarse", agregó.

Los analistas temen que un menor crecimiento económico y la reducción de las opciones de refinanciamiento tras unas medidas contra los préstamos fuera de la hoja de balance puedan poner en jaque a los gobiernos locales con finanzas ajustadas.

Eso podría repercutir en la economía china, con un aumento de préstamos en mora que haría a los bancos más reticentes a prestar.