MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
La crisis ha pasado factura a la llegada de turistas en 2010 a Cuba, en particular los españoles, que cayeron un 20 por ciento respecto a 2009, según ha indicado el ministro de Turismo de la isla, Manuel Marrero, durante un encuentro con empresarios del sector turístico español aprovechando su estancia en Madrid para asistir a Fitur, a los que agradeció su interés en seguir invirtiendo en su país.
Según ha explicado Marrero, "2010 ha sido un año difícil para Cuba porque la crisis económica internacional se hizo sentir" en cuanto a la llegada de turistas. El ministro, que no dio cifras concretas de la llegada de turistas el año pasado, sí dijo que Canadá sigue siendo el principal país emisor de turistas hacia la isla, con "casi un millón".
En el caso de los países europeos, se ha recuperado la llegada de turistas procedentes de países como Francia e Italia, mientras que en el caso de Alemania el número de turistas llegados en 2010 a Cuba se mantuvo similar al del año anterior. "Lamentablemente España fue el mercado que más decreció, con un 20 por ciento menos de turistas", ha señalado Marrero.
Según los datos que el propio ministro había dado a conocer el pasado mayo en relación con 2009, la llegada de turistas extranjeros había aumentado un 3,5 por ciento ese año, hasta superar los dos millones, siendo el mercado español el que más había aumentado con más de 129.000 visitantes, un 6 por ciento más que en 2008.
El titular de Turismo cubano ha atribuido el descenso de turistas españoles el año pasado, además de a la "difícil situación económica" que atraviesa España, a la "quiebra de Marsans", empresa muy activa hasta entonces en el turismo cubano, y también a la huelga de controladores aéreos.
No obstante, se ha mostrado optimista de cara al futuro y ha incidido en que en sus encuentros con motivo de Fitur con responsables de touroperadores, hoteleras y aerolíneas, entre otros, ha podido constatar que "no se han perdido las ganas de vender Cuba" como destino turístico.
MEDIDAS DEL GOBIERNO
Por su parte, el Gobierno cubano "no está sentado esperando a que pase la crisis" sino que está trabajando para "mejorar el producto turístico cubano" modernizando sus hoteles ya existentes y con la previsión de construir nuevas infraestructuras, que incluyen campos de golf, entre otros.
Aunque en Cuba son conscientes de que su principal "fortaleza es el turismo de sol y playa", "estamos convencidos de que la apuesta por un turismo diverso" es la mejor opción de futuro, ha reconocido Marrero, resaltando la riqueza cultural y natural que tiene la isla.
Además, ha explicado el ministro a los asistentes, el Gobierno de Raúl Castro está adoptando una serie de medidas en el plano económico con las que se está "actualizando el modelo económico para poder actualizar el modelo socialista" y que afectan "para bien" al turismo porque "se va a diversificar la oferta".
En este sentido, ha indicado que la posibilidad de que los cubanos abran negocios propios permitirá la existencia de restaurantes y de casas de alojamiento al margen de las infraestructuras estatales.