SANTIAGO/LIMA 23 ene, 23 Ene. (Reuters/EP) -
- Chile y Perú conocerán el lunes un fallo de la Corte Internacional de La Haya sobre un viejo conflicto que mantienen por la frontera marítima.
Lima demanda que se fijen los límites marítimos con su vecino. Santiago asegura que fueron establecidos hace seis décadas.
A continuación algunos detalles sobre el proceso que se inició oficialmente en el 2008:
POSICIONES:
Perú afirma que está pendiente la delimitación marítima con Chile y pide que la Corte Internacional de Justicia de La Haya determine la frontera en el mar con una línea equidistante en dirección al suroeste, trazada desde la costa de ambos países.
Chile, en cambio, dice que la frontera marítima es una línea paralela sobre las aguas del océano Pacífico que fue ratificada en tratados suscritos en 1952 y 1954.
Perú no reconoce como un acuerdo limítrofe los documentos firmados con Chile en 1952 y 1954. Para Lima, solo fueron convenios para fijar la actividad pesquera en esa zona y defender sus recursos hidrobiológicos de la depredación de flotas balleneras extranjeras.
Perú asegura que para delimitar la frontera marítima se debe tener en cuenta el punto de la frontera terrestre que llega al mar, denominado Punto Concordia, conforme al Tratado de Lima de 1929.
Pero para Santiago el límite marítimo comienza a unos 264,5 metros tierra adentro, en el Hito número uno, de acuerdo a los convenios firmados en la década de 1950.
El área de controversia entre la línea de frontera paralela como sostiene Chile y la línea equidistante que plantea Perú abarca unos 38.000 kilómetros cuadrados.
Perú también ha solicitado a La Haya reconocer sus derechos de dominio marítimo en el área dentro de su límite de 200 millas marinas desde sus costas en la frontera con su vecino país. Chile considera esa área, de unos 29.000 kilómetros cuadrados, como zona de alta mar o de aguas internacionales.
PROCESO EN LA HAYA
Perú presentó en enero del 2008 su demanda ante la Corte Internacional de Justicia. En marzo de ese año entregó sus alegatos o "memoria".
Chile presentó en el 2009 sus argumentos o "contramemoria" a la tesis peruana, según establece el proceso. En ellos dijo que no tiene litigios pendientes con Perú.
Como respuesta, Perú entregó en el 2010 su réplica. Un año después, Chile hizo llegar su dúplica, documentos en los que ambos reforzaron sus argumentos.
Finalizadas las presentaciones escritas, el tribunal de La Haya programó para el 3 y 4 de diciembre del 2012 el inicio de los alegatos orales que comenzaron con Perú. El 6 y 7 de diciembre hizo lo propio Chile.
Después hubo una segunda ronda de réplica que inició Perú el 11 de diciembre y cerró Chile el 14 de ese mes. Cumplido este proceso, la Corte quedó en condiciones de emitir el fallo en los siguientes meses.
Después de un receso por vacaciones de miembros de La Haya, y para no hacer coincidir el anuncio con las elecciones presidenciales en Chile, se postergó la lectura del fallo del tribunal para el 27 de este año.
PROTAGONISTAS
Los presidentes de Chile, Sebastián Piñera, y de Perú, Ollanta Humala, han expresado en varias ocasiones su deseo de mantener los vínculos comerciales bilaterales por encima de otras diferencias.
Piñera entrega el 11 de marzo el poder a la presidenta electa de Chile, Michelle Bachelet, cuya postura sobre el fallo será clave para la ejecución del mismo. La demanda de Perú en algún momento llegó a congelar las relaciones entre los países.
El representante del Estado peruano ante la Corte de La Haya y responsable de la presentación de los argumentos de Lima es el ex canciller Allan Wagner, quien fue secretario de la Comunidad Andina entre el 2004 y el 2006.
El agente del Estado chileno es Alberto van Klaveren, quien fue embajador de Chile en la Unión Europea y subsecretario del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El presidente de la Corte Internacional de Justicia de La Haya es el diplomático eslovaco Peter Tomka, elegido en el cargo en febrero del 2012. Su mandato es por tres años.
RELACIONES COMERCIALES
Lima y Santiago han tenido altibajos en sus relaciones tras una guerra que los enfrentó a fines del siglo XIX. En el conflicto Perú perdió parte de su territorio a manos de Chile.
A pesar de la disputa, el intercambio comercial y las inversiones bilaterales han crecido sustancialmente en los últimos años y no deberían verse afectados por el resultado de la demanda, según analistas y empresarios de ambos países.
En Perú las empresas chilenas dominan el rubro minorista y tienen presencia en los sectores de comercio, energía, salud e inmobiliario. En Chile las firmas peruanas -en menor medida- están en la construcción, la industria alimentaria, y los sectores pesquero y minero, entre otros.
Chile es uno de los principales inversores latinoamericanos en Perú, con unos 12.000 millones de dólares. Y los capitales de empresas peruanas superan los 8.000 millones de dólares en Chile, según datos de gremios empresariales privados.
Perú y Chile, cuyas economías crecen de forma sostenida desde hace varios años, son los países con mayor apertura comercial en América Latina.