Publicado 06/11/2019 12:08

Deoleo y productores de aceite de oliva de EE.UU. piden prácticas "más estrictas" en la calidad y etiquetado

MADRID, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -

Deoleo y los productores de aceite de oliva de Estados Unidos han solicitado a la Administración de Medicamentos y Alimentos del país norteamericano (FDA, por sus siglas en inglés) que adopte, por primera vez, prácticas "más estrictas y éticas" en la calidad y el etiquetado del aceite de oliva en la región.

Ambas partes confían en que esta petición ponga de manifiesto la necesidad de adoptar estándares basados en criterios científicos al aceite de oliva, con el objetivo de poder ofrecer a los consumidores un producto "honesto y justo" e impulsar la competitividad y dinamismo en la industria, según ha informado la compañía.

El presidente y consejero delegado de Deoleo, Ignacio Silva, ha resaltado que los consumidores tienen derecho a saber lo que están comprando y "una ausencia de un entorno normativo aplicable lo hace difícil". "Esta petición supone una increíble oportunidad para mejorar la calidad en toda la categoría y, lo que es más importante, para restablecer la confianza del consumidor en el aceite de oliva. Apoyamos los estándares de clasificación basados en la ciencia porque estamos comprometidos con la calidad. Es así de simple", ha subrayado.

La petición a la FDA se produce después de que la imposición de aranceles por parte de la Administración Trump a las importaciones de productos agroalimentarios como el vino, aceite, aceitunas y quesos de la Unión Europea.

En 2015, la Liga Nacional de Consumidores de Estados Unidos llevó a cabo una investigación al etiquetado incorrecto del aceite de oliva y reveló que seis de las once marcas nacionales habían manipulado los grados de calidad de los productos dirigidos a los consumidores.

Una auditoría externa realizada de 2015-2019 desveló que la mitad de todos los productos disponibles para los consumidores no cumplen en la actualidad con los estándares de calidad internacionales.

"Los consumidores tienen el derecho a saber lo qué están comprando y deben sentirse seguros de que, al comprar un aceite de oliva de su elección, están adquiriendo un producto de calidad que aporta grandes beneficios para su salud y que se corresponde con el grado de calidad que demandan", señala la compañía, que ha solicitado que se establezca una definición "clara" de la calidad del aceite de oliva virgen extra, aceite de oliva virgen y aceite de oliva para que los consumidores estadounidenses puedan elegir un producto a un precio "adecuado" que se ajuste a sus preferencias.