Actualizado 20/06/2019 14:25

El desempleo en Argentina alcanza el 10,1% y regresa a los dos dígitos después de 13 años

¿Qué es el riesgo país y por qué subió a niveles históricos en Argentina?
TWITTER - Archivo

   BUENOS AIRES, 20 Jun. (Notimérica) -

   El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) informó que la tasa de desempleo en Argentina alcanzó en el primer trimestre de 2019 el 10,1%, superando por primera vez los dos dígitos desde 2006.

   "La tasa de desocupación alcanzó el 10,1% en el primer trimestre de 2019", señaló el Indec en un informe.

   Esta cifra indica que hay en el país iberoamericano casi dos millones de desocupados, tomando en cuenta solo el total de conglomerados urbanos que mide el Indec.

   El organismo registró que el nivel de la subocupación se elevó dos dígitos en el último año y llegó al 11,8% de la población, de los cuales un 8,4% demanda un nuevo empleo, frente a un 6,8% de subocupación demandante en el primer trimestre de 2018.

   Con una población activa de 13.285.430 personas, la tasa de actividad, que se refiere a ella en relación al porcentaje de la ciudadanía en edad de trabajar, es del 47%. El indicador de empleo, que alude a la población ocupada, alcanza al 42,3% de la población.

   El total, los ocupados demandantes de empleo representan el 17,5% de la población, contra un 15,3% registrado en los primeros tres meses del año pasado.

   La desocupación es especialmente incisiva entre las mujeres de entre 14 y 29 años de edad (23,1%), y en menor medida, entre varones en la misma franja de edad (18,5%).

   Del mismo modo, el ente estadístico informó que el Producto Interior Bruto (PIB) de Argentina cayó un 5,8% interanual en el primer trimestre de 2019, y un 2% respecto al trimestre anterior.

   Actualmente, Argentina se encuentra en un contexto de recesión económica producto de la caída de su industria nacional, el aumento del Riesgo País, la baja del consumo interno ante la inflación y la desvalorización de su moneda local respecto al dólar.

   El Fondo Monetario Internacional (FMI) adjudicó, en mayo de 2018, un crédito de 50.000 millones de dólares al país, a cambio de un fuerte ajuste fiscal, con el propósito de recuperar la confianza de los inversores extranjeros.