NUEVA YORK, 27 Jun. (Reuters/EP) -
- El dólar se afirmaba contra el yen el jueves pero se negociaba con pocos cambios frente al euro, tras datos de la economía estadounidense que en su mayoría indicaron que pasará tiempo antes de que la Reserva Federal reduzca su programa de estímulos, una sensación ratificada por funcionarios de la Fed.
El dólar se ha beneficiado con un alza de los rendimientos de los bonos del Tesoro debido a que más inversores descuentan la probabilidad de que la Fed comenzará a reducir paulatinamente su programa de compra mensual de bonos por 85.000 millones de dólares antes de fin de año.
Ese escenario se hizo más creíble la semana pasada cuando el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, dijo que la economía estadounidense se estaba expandiendo lo suficiente para que el banco central comience a desacelerar el ritmo de su programa antes de que culmine el 2013.
Pero los datos del jueves no fueron lo suficientemente sólidos para adelantar las expectativas de los inversores sobre el momento del final de la ronda de alivio cuantitativo.
El gasto del consumidor rebotó en mayo y los nuevos pedidos de subsidios por desempleo cayeron la semana pasada, sugiriendo que la economía sigue en un sendero de crecimiento moderado.
El influyente jefe del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, William Dudley, dijo el jueves que las compras de la Fed podrían ser más agresivas que lo que Bernanke esbozó la semana pasada si el crecimiento económico y el mercado laboral tienen desempeños más débiles que lo esperado.
En tanto, el gobernador de la Fed, Jerome Powell, declaró que los mercados financieros han reaccionado en demasía a las declaraciones de la Reserva Federal y han adelantado demasiado sus expectativas de cuando se decidirá un alza de las tasas.
El dólar se negociaba con un alza del 0,7 por ciento, a 98,39 yenes por unidad, acercándose al pico que tocó el lunes a 98,70 yenes. Pero operadores dijeron que su apreciación podría ser limitada por grandes órdenes de venta por encima de 98,70 yenes.
En tanto, el euro estaba casi plano a 1,3015 dólares.
El índice dólar, que mide a la divisa estadounidense contra una cesta de monedas, subía un 0,1 por ciento a 83,068, tras tocar un máximo de tres semanas a 83,171.