Actualizado 06/07/2013 01:13

Dólar sube a máximo de varias semanas contra el yen y el euro


NUEVA YORK, 5 Jul. (Reuters/EP) -

- El dólar alcanzó el viernes máximos de cinco semanas contra el yen y un techo de seis semanas frente al euro, debido a que datos laborales mejores a lo esperado en Estados Unidos impulsaban las expectativas de que la Reserva Federal empiece a reducir sus compras de bonos a partir de septiembre.

Los operadores de tasas a futuro también apuestan a que el banco central estadounidense comenzará a subir las tasas de interés a corto plazo para septiembre del próximo año, una medida que haría más atractivos a los activos denominados en dólares.

Casi todos los componentes del reporte estadounidense de nóminas no agrícolas para junio fueron positivos para la economía, lo que sugiere que el mercado laboral se estabiliza.

Los empleadores sumaron 195.000 puestos de trabajo, en comparación con pronósticos de 165.000, mientras que la tasa de desempleo se mantuvo estable al 7,6 por ciento, ya que más personas entraron a la fuerza laboral.

Además, las nóminas revisadas del Gobierno estadounidense para abril y mayo indicaron la creación de 70.000 puestos más que lo reportado previamente.

El euro bajó a un mínimo de 1,2805 contra el dólar, su menor nivel desde el 20 de mayo. Terminó la sesión en 1,2829 dólares, con un retroceso del 0,7 por ciento.

Frente al yen, el dólar alcanzó un máximo de 101,22 unidades, su nivel más alto desde el 31 de mayo. La moneda estadounidense cerró en 101,15 yenes, un alza de 1,1 por ciento.

El euro se depreció contra el dólar por tercera semana consecutiva y presentó un declive de un 1,4 por ciento esta semana. Mientras, el billete verde avanzó contra el yen por tercera semana consecutiva y ascendió casi un 2 por ciento desde el lunes.

Las ganancias de la divisa estadounidense impulsaron previamente al índice dólar a un techo de 84,530, cerca de un máximo de tres años. En la tarde del viernes, el índice dólar subió 1,4 por ciento a 84,433.

La potencial reducción de las medidas de estímulo por parte de la Fed estaba en fuerte contraste con las declaraciones del Banco Central Europeo (BCE) y del Banco de Inglaterra (BoE), que prometieron el jueves mantener sus políticas monetarias expansivas por un tiempo.