Actualizado 26/02/2012 05:44

Los BRICS exigen que el presidente del Banco Mundial no sea estadounidense


CIUDAD DE MÉXICO, 26 Feb. (Reuters/EP) -

Los países emergentes, aglutinados en torno al grupo denominado BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) han reclamado este sábado que se revoque la ley no escrita que establece que el presidente del Banco Mundial ha de ser de nacionalidad estadounidense y han asegurado que propondrán un candidato, en el marco de la cumbre del G-20 que se celebra en Ciudad de México.

El ministro de Finanzas de Brasil, Guido Mantega, ha argüido que "los candidatos deben basarse en el mérito, no en la nacionalidad". Otros representantes del BRICS han precisado que el grupo propondrá un candidato, sea cual sea el de Estados Unidos.

Los países miembro del Banco Mundial tienen hasta el próximo 23 de marzo para designar a su candidato y será en abril, cuando se celebren sendas cumbres en el Banco Mundial y en el Fondo Monetario Internacional (FMI), cuando se tome una decisión.

Desde el final de la Segunda Guerra Mundial, el presidente del Banco Mundial ha sido de nacionalidad estadounidense bajo una ley no escrita que establece que el puesto de director gerente del FMI ha de ser ocupado por un europeo.

"Es el momento de romper con las tradiciones de Estados Unidos y Europa de repartir los dos asientos, y los demás debemos intentar esta vez seriamente alcanzar un consenso", ha matizado el ministro de Finanzas sudafricano, Pravin Gordhan. "Pueden proponer su candidato", ha dicho, "pero antes de convertirse en un ejercicio destructivo, debería ser un proceso constructivo para así intentar construir un consenso sobre el candidato que debe haber".

El presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, ha confirmado que oficializará su dimisión a finales de junio después de que rechazara optar a un segundo mandato de cinco años. Los principales candidatos en liza son la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, y la embajadora estadounidense ante la ONU, Susan Rice.

Por otra parte, los BRIC han asegurado que contribuirán económicamente a aliviar la crisis de la deuda europea, pero lo ha condicionado a que se les otorgue un mayor poder en el seno del FMI y a que la UE refuerce los fondos de financiación.

Mantega ha reafirmado el consenso existente en el G-20 sobre el hecho de que Europa debe hacer más para solucionar sus problemas con la deuda antes de aumentar su contribución al fondo de rescate único que demanda.