AUBURN HILLS (ESTADOS UNIDOS), 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El grupo automovilístico estadounidense Chrysler ha puesto en marcha una campaña de revisión que afecta a 9.688 unidades del modelo Dodge Charger destinado a la Policía del país, con motivo de eventuales problemas en el sistema de frenado y en el de iluminación, informó la empresa en un comunicado.
Chrysler explicó que las unidades afectadas por esta acción corresponden a los modelos 2011 y 2012 (fabricados entre julio de 2010 y diciembre de 2011) y afirmó que a través de esta medida recolocará los fusibles de los sistemas ABS y ESC y sustituirá el cable de sujeción del sistema de alumbrado delantero.
La compañía explicó que algunas unidades de estos modelos destinados a la Policía de Estados Unidos pueden experimentar una iluminación tenue como consecuencia de un sobrecalentamiento del conector de anclaje de la lámpara. Además, Chrysler recolocará el ABS y el ESC en estos coches para evitar un sobrecalentamiento del Módulo de Distribución de la Energía.
El jefe de Investigación de Producto y de Campañas del grupo estadounidense, David Dillon, subrayó que estos eventuales defectos se producen con motivo de las severas condiciones de uso de la Policía, entre las que se incluyen circular a altas velocidades o llevar a cabo conducción evasiva, entre otros aspectos.
En este sentido, Dillon afirmó que la empresa continuará monitorizando la flota de automóviles para detectar cualquier suceso anormal. La firma indicó que no ha tenido conocimiento de que estos defectos hayan provocado ningún accidente.