Actualizado 09/12/2014 12:41

EEUU ve a rebeldes sirios en solución política, no militar: diario Asharq al-Awsat


BEIRUT, 27 oct, 27 Oct. (Reuters/EP) -

- Estados Unidos no espera que los rebeldes sirios que planea entrenar para que combatan a militantes de Estado Islámico también luchen contra las fuerzas del presidente Bashar al-Assad, pero los considera una parte crucial de una solución política para poner fin a la guerra, dijo un alto funcionario estadounidense.

Estados Unidos, que lidera una coalición internacional que realiza ataques aéreos contra el Estado Islámico en Siria, ha dicho que quiere entregar y equipar a rebeldes "moderados" para que combatan al grupo militante que ha capturado territorios en Siria y la vecina Irak.

Al ser consultado sobre si esas unidades de rebeldes del Ejército de Siria Libre (FSA, por su sigla en inglés) finalmente combatirían contra fuerzas del Gobierno sirio, el representante de la coalición estadounidense, John Allen, respondió al diario Asharq al-Awsat:

"No. Lo que nos gustaría ver es que la FSA y las fuerzas que finalmente generemos, entrenemos y equipemos se conviertan en una fuerza creíble que el Gobierno de Assad finalmente tenga que reconocer".

"No va a haber una solución militar aquí", agregó en comentarios publicados durante el fin de semana en el sitio web en inglés del periódico.

El Ejército de Siria Libre es un término usado para describir a decenas de grupos armados que combaten para derrocar a Assad, pero con poco o sin un comando central. Esos grupos han sido ampliamente superados en armamento por insurgentes islámicos, como el Estado Islámico.

Combatientes rebeldes han manifestado su frustración con la aproximación liderada por Estados Unidos para combatir al Estado Islámico.

Esos críticos afirman que Washington y sus aliados árabes están demasiado concentrados en aplastar al grupo militante a costa de confrontar a las fuerzas del Gobierno sirio, a las que muchos rebeldes siguen viendo como el enemigo definitivo.

La Fuerza Aérea siria ha aumentado su propia campaña de bombardeos contra zonas en poder de insurgentes desde el comienzo de los ataques aéreos liderados por Estados Unidos el mes pasado, aumentando el temor entre los rebeldes de que el Gobierno esté aprovechando la distracción de la campaña de la coalición.

Allen dijo que existe la necesidad de aumentar la credibilidad de la oposición siria moderada a nivel político y agregó que es normal que las fuerzas rebeldes choquen con los militares sirios en la medida en que busquen defender sus territorios y a sus familias.

"Pero la intención no es crear una fuerza terrestre para liberar a Damasco, esa no es la intención", declaró al periódico Allen, un general estadounidense retirado.

"El propósito es que en el resultado político, ellos deben ser una voz prominente, quizás la voz prominente, en la mesa para finalmente contribuir al desenlace político que buscamos", dijo Allen al iniciar una gira por Oriente Medio.

Naciones Unidas dice que más de 191.000 personas murieron desde el comienzo del levantamiento sirio contra el mandato de Assad en el 2011. Grupos de derechos aseguran que la cifra real es mayor.