MADRID 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
Bank of America (BoFA) considera que la negativa del Gobierno español a elevar el presupuesto para defensa hasta el 5% del PIB supone el "riesgo" de que otros países se sumen a esta postura y suscite una "respuesta negativa" por parte de Estados Unidos (EE.UU.).
"En nuestra opinión, los países del sur de Europa, como España o Italia, no alcanzarían el 3,5% a medio o largo plazo, pero esto abre un nuevo escenario de cara a la cumbre de la OTAN. Queda por ver cómo reaccionan los países de la Unión Europea y Estados Unidos. En nuestra opinión, el riesgo es que más países apoyen la opinión de Sánchez", subraya la entidad financiera en un informe.
"Esto añadiría incertidumbre a la cumbre de esta semana y podría suscitar una respuesta negativa por parte de Estados Unidos, dado el interés de la nueva administración estadounidense por un reparto adecuado de las cargas en materia de defensa", añade.
Este pasado domingo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció un acuerdo con la OTAN para no elevar el gasto militar de España hasta el 5% del PIB: "Respetamos el deseo legítimo de otros países de aumentar su inversión en defensa, si así lo quisieran, pero nosotros no vamos a hacerlo".
Sánchez calificó el pacto como "muy positivo" para España y para la OTAN puesto que permite "cumplir con la Alianza Atlántica" y "preservar su unidad" sin tener que incrementar el gasto en defensa al 5%, además de detallar que la participación de España en la alianza y los compromisos mutuos "siguen intactos".
En este contexto, uno de los argumentos que ha esgrimido Sánchez para defender su negativa a elevar el gasto es que pasar del 2% del PIB que se destina en la actualidad al 5% en 2035 "exigiría gastar unos 350.000 millones de euros adicionales".
"Solo podrían conseguirse a base de subirle a cada trabajador y trabajadora los impuestos en unos 3.000 euros anuales. Eliminar las prestaciones por desempleo, enfermedad y maternidad. Reducir en un 40% todas las pensiones. O recortar a la mitad la inversión estatal en educación desde los cero años hasta la universidad", subrayó.
En este sentido, Sánchez ha precisado que España va a necesitar dedicar el 2,1% de su PIB, "ni más ni menos", para cumplir con sus objetivos de capacidades dentro la OTAN de cara a los próximos años.
Sin embargo, este mismo lunes, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha negado que haya concedido una claúsula de exclusión a España para no comprometerse a gastar el 5% en defensa, tal y como se prevé que pactarán los aliados en la cumbre de La Haya.
En esa línea, ha indicado que el cálculo de la organización es que España tendrá que invertir el 3,5% de su PIB en defensa para cumplir con los requerimientos militares pactados por la OTAN.
"En la OTAN no hay claúsulas de exclusión y no entiende de pactos o acuerdos paralelos", ha zanjado el jefe político de la OTAN en la rueda de prensa previa a la cumbre de líderes de La Haya al ser preguntando sobre si España cuenta con una excepción al compromiso de gasto que se acordará en el encuentro y tras confirmar en una misiva a Sánchez este domingo que permitiría a España marcar su propia senda de gasto.
En este punto, Rutte ha puesto de relieve los objetivos militares acordados por todos los aliados, lo que obligará a invertir por encima del 3%, según sus cálculos, después de que Sánchez asegurara que España necesita solo el 2,1%.
"España cree que puede alcanzar esos objetivos con un porcentaje del 2,1%. La OTAN está absolutamente convencida de que España tendrá que gastar un 3,5% para conseguirlo", ha añadido Rutte.