Actualizado 06/05/2014 20:12

Europa propone reglas más estrictas sobre cajas negras tras misteriosa desaparición de avión malasio

Por Tim Hepher

PARIS, 6 mayo, 6 May. (Reuters/EP) -

- Funcionarios europeos de seguridad propusieron el martes normas más estrictas sobre las grabadoras de vuelo conocidas como "cajas negras", en la reacción reguladora más fuerte hasta el momento frente a la desaparición del vuelo MH370 de Malaysia Airlines hace dos meses.

La Agencia Europea de Seguridad Aérea (AESA) dijo que propondría incrementar los tiempos de grabación en la caja negra de la cabina de pilotos a 20 horas en vez de dos, para facilitar la comprensión de accidentes de aviones y prevenir que se grabe sobre evidencia vital.

Las propuestas recientemente publicadas también harían entrar en vigor recomendaciones hechas por investigadores franceses tras la pérdida de un avión de Air France en el Atlántico en 2009, pero que permanecen estancadas en negociaciones entre reguladores.

Estas incluyen la adición de una nueva frecuencia de señal que facilita la localización de las cajas grabadoras bajo el agua, donde las frecuencias más bajas tienen mayor alcance.

Las propuestas, que aparecieron en un texto publicado el martes por AESA y confirmaron detalles reportados por Reuters, fueron presentadas a la Comisión ejecutiva de la Unión Europea, que las utilizará como base para cambios legislativos.

No se han hallado rastros del vuelo MH370 desde que desapareció tras desviarse de su recorrido original entre Kuala Lumpur y Pekín el 8 de marzo, a pesar de que se está realizando la búsqueda más intensiva en la historia de la aviación comercial.

"Los cambios propuestos incrementarían la seguridad al facilitar la recuperación de información por parte de autoridades investigadoras de seguridad", señaló el director ejecutivo de AESA, Patrick Ky, en un comunicado.

AESA también adelantó a 2018 un plazo para extender de 30 a 90 días la vida útil de las baterías en las balizas localizadoras de emergencia que portan las cajas negras.

Todos los aviones de pasajeros tienen dos grabadoras de vuelo, una de voz y otra de datos. Cada una está equipada con una baliza diseñada para comenzar a emitir señales al entrar en el agua.

La extensión de la vida útil de las baterías es hasta ahora la única recomendación de los tres años de investigación sobre el desastre de Air France en obtener pleno apoyo en la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), un organismo de la ONU que coordina estándares de seguridad aérea.