Actualizado 21/07/2016 12:16

El FMI advierte que el nivel de deuda pública de El Salvador es "insostenible"

El FMI propone medidas estructurales para mejorar el crecimiento de El Salvador
PIXABAY

   SAN SALVADOR, 21 Jul. (Notimérica) -

   Un informe del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la situación económica de El Salvador advierte que, si el país no camina hacia una consolidación fiscal decidida, la deuda pública seguirá aumentado y será "insostenible". Este documento ha puesto en alerta a funcionarios del Gobierno, que se han puesto a pensar qué medidas de carácter estructural-financiero pueden establecer para evitar el colapso económico.

   "Evaluamos que un ajuste del balance primario del tres por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) a lo largo del periodo 2017-2019, con una concentración del ajuste al comienzo del período para disminuir los riesgos de financiación, es lo mínimo necesario para revertir la dinámica a la alza de la deuda", explica el FMI en su informe.

   Algunas de las medidas que el FMI ha propuesto al Gobierno salvadoreño son: elevar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 13 al 15 por ciento; reformar el sistema de pensiones; no incrementar salarios; reducir el gasto público; reducir la tasa de impuestos empresariales a la vez que se reduzcan las exenciones; aumentar los impuestos progresivos mediante la introducción de un impuesto sobre el patrimonio y el aumento del impuesto sobre la renta para las personas naturales con los ingresos más altos.

   De acuerdo con el informe, aplicar ajustes podría reducir el crecimiento económico por debajo del dos por ciento "transitoriamente", lo que sería sensible para el país. Sin embargo, considera que es la solución "urgente" que lo llevaría a una posición fiscal más sólida, sumado a enérgicas "reformas estructurales", lo que crearía condiciones para una "recuperación rápida hacia el tres por ciento en el mediano plazo.

   El déficit fiscal de El Salvador ha sido de alrededor del cuatro por ciento del PIB desde 2010, generando necesidades brutas de financiamiento anuales de ocho y nueve por ciento del PIB, un nivel elevado para un país con un tamaño de mercado pequeño, lo que crea presiones periódicas y la necesidad de acudir a los mercados externos. Actualmente la deuda del estado salvadoreño ya ha alcanzado al 63 por ciento del PIB.

   El cierre del grifo de fondos de parte de los multilaterales habría llevado al Gobierno a buscar urgentemente un acuerdo "stand-by" con el FMI. Este acuerdo ayudaría a que el país reciba asistencia técnica de otros organismos como el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para lograr estabilizar las finanzas públicas. El Salvador ya suscribió este tipo de acuerdos con el FMI entre 2009 y 2010, durante la última gran crisis mundial. Un nuevo pacto de este tipo permitiría crear una hoja de ruta y buscar un ordenamiento de las cuentas fiscales.

LOS CUATRO RETOS DEL FMI PARA AUMENTAR EL CRECIMIENTO ECONÓMICO

   Este miércoles, el FMI presentó las conclusiones finales de la Consulta del Artículo IV de este año, en el que resaltó cuatro importantes desafíos a tomar en cuenta en El Salvador para contrarrestar el débil crecimiento económico que registra.

   El primer desafío al que se enfrenta son las reformas estructurales, para elevar el crecimiento, el FMI dice que es necesario implementar una serie de reformas estructurales amplias para mejorar la competitividad y la inversión y reducir la delincuencia y la incertidumbre en el territorio.

   El segundo reto consiste en la reducción del déficit fiscal, el organismo revela en su informe que es necesaria una reducción del déficit fiscal del tres por ciento de PIB durante los próximos tres años. Esta reducción se necesita de "manera urgente y firme", según Mario Garza, representante del FMI.

   En tercer lugar se encuentra la consolidación de medidas que regulen los ingresos y gastos. Y como último reto están la reforma de pensiones, dónde es necesario elaborar una propuesta de reforma en las pensiones que exija cambios paramétricos, lo que incluye elevar la edad de jubilación, aumentar las contribuciones y vincular de manera más estrecha las prestaciones.