PARÍS, 6 May. (EUROPA PRESS) -
La Marina francesa ha localizado un área de cinco kilómetros alrededor de las cajas negras del vuelo AF 447 París-Rio de Janeiro que desapareció en el mar el pasado 1 de julio de 2009 y que se saldó con la muerte de 228 de 32 nacionalidades diferentes, entre ellas 61 franceses y 58 brasileños.
Dicho hallazgo ha sido posible gracias a un nuevo análisis de las grabaciones de audio realizadas en el fondo del mar unas semanas después de producirse el accidente aéreo, y tras haber anunciado la 'Oficina de Investigaciones y Análisis para la Seguridad de la Aviación Civil' (BEA) que las tareas de búsqueda de las cajas se prolongarían hasta el 25 de mayo, según informa hoy la prensa local.
Los investigadores han trabajado en grabaciones realizadas por los robots en el fondo del océano, aunque estos registros habrían sido analizados de nuevo gracias a un software específico del grupo Thales que habría permitido acotar este área.
Ahora, un robot equipado con cámaras intentará profundizar en el área para localizar visualmente las cajas. "Esto no significa que vayamos a encontrarlas", recordó, no obstante, el portavoz adjunto del Ministerio de Defensa francés, Christian Baptiste.
"Es evidente que sería una gran noticia para todos. En primer lugar, para las familias de las víctimas y luego para todos nosotros porque llevamos esperando un año para poder saber lo que realmente ocurrió en el vuelo", señaló por su parte el portavoz gubernamental Luc Chatel.
La noticia se produce días después de que la BEA anunciara que se seguirían buscando las cajas negras del vuelo con el objeto de esclarecer las causas del accidente. Esta nueva etapa de la investigación está financiada con fondos de Airbus --empresa fabricante del avión accidentado-- y Air France, a razón de 1,5 millones de euros cada una, como parte de una inversión total de diez millones de euros para la recuperación de la restos.
Los investigadores no han podido establecer la causa exacta del accidente y podrían hacerlo si encuentran las cajas. No obstante, se especula con que la causa del accidente fue una posible creación de placas de hielo en los sensores de velocidad de la aeronave que parecen haber proporcionado lecturas inconsistentes segundo antes de que el avión desapareciera.