MADRID, 11 Ene. (Notimérica) -
La economía iberoamericana tiene razones para ser optimista en 2019. Si el año pasado predominó la política electoral, por los comicios presidenciales y de congreso que tuvieron siete países de la región, en este nuevo año parece que predominará la economía, por los grandes desafíos ante el endeudamiento, gasto público y crecimiento que viven la gran mayoría de países de la región. Además, existe una gran expectación sobre el plan que adoptarán los nuevos gobiernos de tres gigantes latinoamericanos: Brasil, México y Colombia.
Uno de los retos económico que enfrentan la mayoría de los países iberoamericanos es el abultado endeudamiento de sus respectivos estados. El caso más destacado es el de Argentina. El gobierno de este país no pudo aplicar a tiempo los ajustes y reformas necesarias para enderezar el rumbo, viéndose obligado a pedir un rescate financiero al Fondo Monetario Internacional (FMI) de 57.000 millones de dólares.
Según el Banco Mundial, el endeudamiento de la región iberoamericana, en porcentajes del Producto Interno Bruto (PIB), está liderado por Venezuela (80,9%), Argentina (80,0%), Brasil (78,0%) y el Salvador (76,3%).
Por su parte, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) indica con preocupación un aumento de casi un 80% de la deuda externa bruta de América Latina entre 2009 y 2017.
"Es cierto que algunas potencias económicas tienen deudas muy superiores a las de los países latinoamericanos, entre ellas China con un endeudamiento equivalente al 268% de su PIB. Sin embargo, también es cierto que el ritmo de crecimiento, la solidez y la dinámica de su economía les permite este tipo de manejos", indica el politólogo Roberto Rave para 'CNN'.
Del mismo modo, el experto asegura que la inversión extranjera ha venido descendiendo en los últimos años debido a la disminución de la demanda de materias primas, "lo cual tiene su razón de ser en la desaceleración económica de las principales potencias económicas, pero también, en la inestabilidad política".
En referencia al crecimiento económico, la agencia Moody's Analytics destaca 2019 como un año de recuperación económica general para la región latinoamericana: "Perú será el país con la mayor expansión en 2019, con un 3,7%; seguido de Colombia, con un 3,3%; Chile con un 3,2% y Uruguay con un 3,1%. Brasil, la mayor economía de la región, podría encaminarse hacia un 2% el próximo año, mientras que México, en el segundo puesto, se desaceleraría a un 1,6%. Por su parte, la economía de Argentina se contraerá un 0,8% en 2019, mientras que el PIB de Venezuela se reducirá en un 8%".
PREOCUPACIONES
Por otro lado, existen otros desafíos importantes para América Latina que frenan el crecimiento y que preocupan durante este 2019. Uno de ellos es la competitividad. Según el índice de competitividad del Foro Económico Mundial, América Latina ha perdido mucha competitividad frente al mundo. Con excepción de países que mejoraron su calificación, como Chile (subió tres puestos), Honduras (subió dos lugares) y Paraguay (subió uno), los demás descendieron en este importante indicador.
Asimismo, también preocupa la institucionalidad, los altos impuestos, las complejas regulaciones y el cambio de reglas de juego para las empresas en la región.
"No es posible tener verdadero desarrollo social sin crecimiento económico, al tiempo que resulta imposible lograr crecimiento económico sin un sector empresarial amplio, fuerte y dinámico. Es por esto que Latinoamérica debe hacerse viable y atractiva para las empresas, tanto extranjeras como locales", asegura Rave.
2019 supondrá para Iberoamérica un año de leve pero importante crecimiento. Sin embargo, solamente el tiempo pondrá a cada uno de los gobiernos en el panorama económico correspondiente con cada una de sus gestiones con las que intentarán que la economía de cada una de las regiones iberoamericanas siga creciendo.