Publicado 19/02/2019 22:25

¿Resolverá los problemas de Pemex el nuevo plan fiscal anunciado por López Obrador?

PEMEX
REUTERS - Archivo

   CIUDAD DE MÉXICO, 19 Feb. (Notimérica) -

   El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), inyectará 75.000 millones de pesos (unos 3.908 millones de euros) a la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), actualmente una de las empresas más endeudadas del mundo y, sin duda, uno de los mayores retos para el nuevo Gobierno.

   Actualmente, los pasivos de la petrolera equivalen al 97 por ciento de sus activos, lo que hace prever que solo este año la compañía necesitaría más de 10.000 millones de dólares en financiamiento para revertir los casi cinco lustros de caída en la producción.

   Sin embargo, para el Gobierno de AMLO, Pemex es una empresa "muy maltratada, saqueada" durante las últimas décadas, en las cuales ha sido copada de corrupción. Por ello, desde la Presidencia han asegurado que han "tomado la decisión de apoyar a Pemex con todo. Si se requiere más, va a haber más apoyo", indicó el mandatario.

   El plan fiscal de AMLO busca reducir carga tributaria: "Es quitarle cierto porcentaje de los impuestos que la empresa le paga al Gobierno mexicano y, con eso, lograr que sea una empresa solvente por sí misma, que tenga finanzas más sanas, eso es básicamente", explica la analista política Fernanda Torres a 'Actualidad RT'.

   Así, el Gobierno de López Obrador ha estipulado como objetivos del rescate a Pemex incrementar la inversión, la producción y conseguir una deuda cero. La principal medida es, además de combatir el robo de combustible a Pemex --que permitirá contar a la petrolera con 32.000 millones de pesos (1.662 millones de dólares) adicionales--, una inyección de 5.538 millones de dólares.

   La suma económica implica una capitalización por parte del Estado de 25.000 millones de pesos (1.312 millones de dólares), además de otros 35.000 millones (1.824 millones de dólares) de la "monetización" del pasivo laboral de la Secretaría de Hacienda y un incentivo fiscal anual de 15.000 millones de pesos (781 millones de euros).

   Esto permitirá, principalmente, que Pemex no continúe endeudándose y que el Gobierno de AMLO sea el primero en 10 años que sume el saldo negativo de Pemex. Pero, ¿será suficiente para hacer reflotar a la estatal petrolera? "Servirá de ayuda por un tiempo", ha admitido un equipo de investigación de BBVA Research, el banco más importante de México, recoge 'AlNavio'.

   "El perfil de vencimientos de deuda para 2020-23 representará un reto importante para mantener la calificación crediticia de Pemex en el grado de inversión. Para ello, tanto el Gobierno federal como la empresa petrolera tendrán que lidiar eficazmente con el manejo de dicho perfil de vencimientos. Prevemos que estos relativos grandes montos de vencimientos afectarán el crecimiento de los recursos destinados a inversión", indican.

   Según BBVA, los fondos extra serán insuficientes, en especial debido a la situación por la que atraviesa actualmente el mercado del petróleo a nivel internacional. Según la entidad bancaria, Pemex requerirá una renovación interna que asegure, por un lado, el fin de la corrupción, y por otro, un empuje suficiente para que posteriormente la empresa pueda gestionarse y sobrevivir por si sola.

   "Para estabilizar la producción petrolera y eventualmente incrementarla, la inversión aprobada tendría que duplicarse y canalizarse predominantemente a actividades de exploración y producción. Pero dada la fuerte limitación de Pemex a seguir endeudándose, los recursos adicionales para inversión en dichas actividades tendrían que provenir de recursos del presupuesto público", explica el banco.