Publicado 09/11/2013 03:30

RESUMEN 2-Irán y potencias mundiales extienden negociación para lograr acuerdo nuclear

* Kerry y Zarif se reúnen por cinco horas para acortar diferencias

* Negociaciones se extienden un día más, seguirán el sábado

* Irán quiere alivio de sanciones petroleras y bancarias para lanzar acuerdo

* Potencias lo descartan y ofrecen acceso a activos iraníes congelados

* Israel rechaza de plano cualquier acuerdo

(Actualiza con reunión de Kerry y Zarif, detalles y citas; cambia título, redacción y autor)

Por Lesley Wroughton y Yeganeh Torbati

GINEBRA, 8 nov, 9 Nov. (Reuters/EP) -

- Irán y seis potencias mundiales extendieron el viernes sus negociaciones sobre el programa nuclear de Teherán a un tercer día no programado, mientras los principales diplomáticos se esfuerzan por concretar el tan ansiado acuerdo que ponga fin a una década de estancamiento.

Estados Unidos e Irán fueron cautos y revelaron poco luego de una reunión tripartita que duró cinco horas entre sus respectivos ministros de Asuntos Exteriores y la jefa de política exterior de la Unión Europea, Catherine Ashton, quien está coordinando las negociaciones entre el estado islámico y las seis potencias mundiales.

Las potencias buscaron un acuerdo para disipar las preocupaciones internacionales de que Irán esté indagando la forma de fabricar bombas nucleares y, a cambio, ofrecieron a la nación de Oriente Medio un alivio limitado de las sanciones que están afectando su economía.

El objetivo es dar el primer paso hacia una resolución de una prolongada disputa que de otro modo podría colocar nuevamente en conflicto a una región caracterizada por su inestabilidad y sus riquezas en petróleo.

"Estamos trabajando duro", dijo el viernes a periodistas el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, cuando regresó al hotel cerca de la medianoche (2300 GMT) tras la reunión con Ashton y el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Javad Zarif.

Las negociaciones, originalmente planeadas como un encuentro de dos días a realizarse jueves y viernes, continuarán el sábado por la mañana.

A diferencia de reuniones anteriores entre Irán y potencias occidentales llevadas a cabo en la última década, esta vez todas las partes han mostrado reserva sobre los detalles de las negociaciones, evitando las críticas y acusaciones mutuas de falta de seriedad que caracterizaban a aquellos encuentros.

Diplomáticos involucrados en las conversaciones dicen que esa es una señal de la seriedad de ambas partes.

Kerry dijo que intentaría "reducir esas diferencias, creo que nadie debería equivocarse en que hay algunas brechas importantes que deben cerrarse".

Irán manifestó una gran diferencia poco después cuando un miembro de su equipo negociador, Majid Takt-Ravanchi, dijo a la agencia de noticias Mehr que las sanciones petroleras y bancarias impuestas a Teherán deben ser aliviadas durante la primera fase de cualquier acuerdo.

Las potencias han ofrecido a Irán acceso a hasta 50.000 millones de dólares en fondos iraníes congelados en el exterior durante muchos años, pero descartaron una amplia eliminación de las sanciones en la primera etapa de cualquier acuerdo.

Kerry se unió a los ministros de Relaciones Exteriores de grandes potencias en Ginebra para ayudar a cimentar un acuerdo preliminar, mientras Israel advirtió que estaban incurriendo en un error épico.

Diplomáticos occidentales dijeron que un acuerdo aún es incierto y que en caso de lograr avances, sólo serán el primer paso en un largo proceso hacia una resolución permanente.

Sin embargo, dijeron que la llegada de Kerry, del secretario británico de Asuntos Exteriores William Hague y de los ministros de Relaciones Exteriores francés y alemán, Laurent Fabius y Guido Westerwelle, respectivamente, señala que los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU y Alemania podrían estar más cerca que nunca de lograr un pacto con Irán.

El canciller ruso, Sergei Lavrov, tenía previsto sumarse el sábado a las conversaciones en Ginebra, dijeron fuentes diplomáticas, en otra señal de que podría firmarse un acuerdo interino.

"Lavrov está viniendo mañana", dijo una fuente diplomática que habló bajo condición de anonimato.

Un alto funcionario del Departamento de Estado de Estados Unidos afirmó que Kerry está comprometido a hacer "lo que podamos" para superar la brecha con la República Islámica.

Las potencias apuntan a contener el trabajo nuclear de Irán para impedir cualquier avance hacia la creación de la capacidad para producir armas nucleares.

RECHAZO DE ISRAEL

Kerry arribó a Ginebra proveniente de Tel Aviv, adonde se reunió con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien considera las aspiraciones atómicas de Irán como una amenaza para el Estado judío.

Netanyahu advirtió a Kerry y a sus contrapartes europeos que Irán lograría "el acuerdo del siglo" si se concretan propuestas para otorgar a Teherán un alivio limitado y temporal a las sanciones a cambio de una suspensión parcial y la promesa de no expandir su enriquecimiento de uranio para combustible nuclear.

"Israel se opone totalmente a estas propuestas y lo que estoy diciendo es compartido por muchos en la región, lo expresen o no públicamente", dijo Netanyahu a periodistas.

"Israel no está obligado por este acuerdo y hará lo que necesite para defenderse y a la seguridad de su gente", dijo antes de reunirse con Kerry en Jerusalén.

El Estado judío no es el único país de Oriente Medio al que le preocupan las ambiciones nucleares de Irán. Arabia Saudita, el principal rival de Teherán por influencia regional, ha dejado claro a Washington que no le gustan las señales de un posible acercamiento entre Estados Unidos e Irán.

Israel ha advertido repetidamente que podría atacar a Irán si no detiene su programa nuclear y ha pedido que no se permita que el país mantenga lo que el Estado judío ve como una incipiente capacidad del país para desarrollar bombas atómicas.

Irán sostiene que sus instalaciones nucleares están destinadas a fines civiles y se ha negado a suspenderlas.

El hecho de que un acuerdo finalmente pueda ser posible tras una década de disputas retóricas en vez de genuinas negociaciones entre Irán y Occidente mostró un cambio de tono importante en la política exterior de Teherán tras la elección en junio de Hassan Rouhani como presidente.

Ambas partes tienen espacio limitado de maniobra, ya que quienes mantienen posiciones duras tanto en Teherán como en Washington criticarán fuertemente cualquier acuerdo que consideren que avanza demasiado en concesiones al otro bando.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que la comunidad internacional podría aliviar levemente las sanciones contra Irán en las primeras etapas de negociación en pos de un acuerdo amplio y permanente.

Kerry dijo previamente en Israel que Teherán debe probar que sus actividades atómicas son pacíficas y que Washington no hará un "mal acuerdo, que deje a cualquiera de nuestros amigos o a nosotros mismos expuestos a un programa de armas nucleares".