Publicado 09/04/2014 13:05

RPT-ACTUALIZA 1-Contratista EEUU preso en Cuba se declara en huelga de hambre

(Repite nota enviada en la noche del martes, texto sin cambios)

Por Daniel Trotta

LA HABANA, 8 abr, 9 Abr. (Reuters/EP) -

- Un contratista estadounidense condenado a 15 años de cárcel en Cuba por intentar crear un servicio ilegal de Internet en la isla se declaró en huelga de hambre por el tratamiento que ha recibido de La Habana y Washington, dijo el martes su abogado.

El abogado criticó además al Gobierno de Estados Unidos por poner en peligro la vida de Alan Gross con el lanzamiento de un servicio secreto de "Twitter cubano" tras su arresto en el 2009.

Gross era un subcontratista de la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID, por sus siglas en inglés) que fue detenido en su quinto viaje a Cuba en un intento por crear una red ilegal de Internet para judíos en la isla.

Cuando Gross, de 64 años, se enteró de que la USAID había lanzado un proyecto social en Cuba tras su detención, dijo que era "la gota final para él", y tomó la decisión de empezar una huelga de hambre que comenzó el jueves, señaló el abogado Scott Gilbert en un comunicado en la tarde del martes.

Un tribunal en Cuba lo condenó en marzo del 2011 a 15 años de prisión, tensionando aún más las relaciones entre Washington y La Habana, viejos enemigos de la Guerra Fría.

Las relaciones sufrieron otro revés la semana pasada tras las revelaciones de que USAID había establecido una red social en Cuba, que las autoridades comunistas de la isla describieron como un intento por subvertir a su gobierno comunista.

"Comencé el ayuno el 3 de abril en protesta por el trato al que estoy sometido por los gobiernos de Cuba y Estados Unidos", dijo Gross en un comunicado.

"Estoy ayunando para objetar las falsedades, engaños y la inacción de ambos gobiernos, no sólo en relación a su responsabilidad compartida por mi detención arbitraria, sino también por la falta de cualquier esfuerzo razonable o válido para resolver esta vergonzosa experiencia penosa", agregó.

Gross reiteró su petición al presidente Barack Obama para que se involucre personalmente en los esfuerzos para lograr su liberación.

El Secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, dijo el martes en una audiencia ante el Senado que "estamos profundamente involucrados en esto (...) estamos muy, muy enfocados en tratar de conseguir la liberación de Alan Gross".

"Su tratamiento es inhumano. Y él está encarcelado injustamente", agregó Kerry.

El contratista perdió 50 kilos de peso en la cárcel antes de iniciar su huelga de hambre, según Gilbert, y rebajó otros 4,5 kilos desde entonces. Gross está confinado 23 horas al día en una pequeña celda que comparte con otros dos presos. Las luces permanecen encendidas todo el día.

"He estado suplicando a nuestro Gobierno por más de cuatro años para traer a Alan a casa", dijo Judy Gross, su esposa, en el comunicado. "Estoy muy preocupada por la salud de Alan y no creo que pueda sobrevivir mucho más de esto".

CANJE DE ESPIAS

Cuba ha expresado su interés en canjear a Gross por tres agentes de inteligencia cubanos presos en Estados Unidos desde 1998 bajo cargos de espiar a grupos de exiliados en Florida y se ofreció a entrar en conversaciones sobre el tema con Washington.

Washington ha rechazado la idea de un intercambio de prisioneros y no se han producido conversaciones formales.

La suerte de Gross puede haber sido perjudicada por la revelación la semana pasada de que USAID participó desde el 2010 al 2012 en la creación de una red social en Cuba.

Las autoridades cubanas dijeron que el programa demuestra los intentos de Washington por socavar al Gobierno.

"Una vez que Alan fue arrestado, es chocante que USAID pusiera aún más en peligro su seguridad ejecutando una operación encubierta en Cuba", dijo Gilbert.

"Ejecutar este programa es contrario a todo lo que nos han dicho los representantes de alto nivel de la administración de Obama acerca de las actividades de la USAID en Cuba", agregó.

El administrador de USAID, Rajiv Shad, se presentó el martes ante una subcomisión del Senado de Estados Unidos y dijo que la red social no tenía como objetivo alentar la disensión contra el Gobierno de La Habana.