SANTIAGO (Reuters/EP) - El sistema eléctrico chileno está fuera de riesgo, pese a estar recibiendo menos gas natural de su único proveedor, Argentina, debido a la puesta en marcha de nuevos proyectos térmicos en una industria que produce mayormente con centrales a gas y diésel.
Así lo aseguró el jueves el ministro de Energía, Marcelo Tokman, quien resaltó que la situación del sistema es muy distinta a la del año pasado, cuando se temía por apagones programados debido no sólo a la escasez de gas natural, sino también a una aguda sequía y altos precios del crudo.
"A pesar de que el primer semestre no tuvimos mayores envíos que el año anterior en términos de gas y la disponibilidad hidroeléctrica estuvo muy por debajo del año anterior, no estuvimos en ningún momento en una situación de riesgo de suministro", dijo Tokman a Reuters.
"De hecho, en este momento en el SIC (Sistema Interconectado Central, que abastece la parte más densamente poblada del país) hay casi 3.000 megas (megavatios) de parque térmico en reserva", agregó el ministro, quien participó de una reunión con corresponsales extranjeros.
Argentina ha estado enviando en los últimos días menos de 1,5 millones de metros cúbicos por día de gas en medio de una mayor demanda en ese país por el recurso, utilizado principalmente para calefacción ante las bajas temperaturas del invierno austral.
Tokman aseguró que se mantiene el compromiso de las autoridades argentinas de enviar suficiente gas para cubrir la demanda residencial y comercial de Chile.
La crisis energética que golpeó al país el año pasado impulsó mayormente proyectos para la construcción de centrales a carbón y se estima que para el 2020 la generación con este combustible crezca a un 25 por ciento desde el 17 por ciento actual.
PLANTA GNL SIN RETRASOS
Tokman se refirió además a la decisión de una autoridad municipal que por considerar que le faltaban permisos, pidió la clausura de la planta de regasificación de gas natural, que el Gobierno junto a firmas privadas construye en la costa central del país y que empezará a operar en agosto.
La justicia rechazó, en primera instancia, el pedido del alcalde de Quintero, lugar donde se construye la planta y que está prácticamente lista para empezar las pruebas de inyección del gas, que se encuentra en un barco que ya llegó a las costas chilenas.
"Cada uno tiene atribuciones, responsabilidades y cada uno tiene preocupaciones distintas. Tenemos una institucionalidad que hay que ver como lo resuelve. Puede haber discrepancias en términos de interpretación, pero lo que corresponde es que la institucionalidad funcione", dijo Tokman.
"En todo caso no ha habido ningún tipo de paralización o suspensión de esta obra", agregó.
Esa planta de GNL le permitirá a Chile dejar de depender del gas que Argentina le envía.
Los socios de GNL Quintero son la británica BG Group, la petrolera estatal chilena ENAP, la generadora eléctrica Endesa Chile y la distribuidora de gas Metrogas.