BRUSELAS, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea y México han anunciado este viernes el compromiso para iniciar "en 2015" las negociaciones para "modernizar" su actual Acuerdo Comercial, vigente desde hace 15 años, con el objetivo de "ajustarlo a la nueva realidad" económica y social de las dos partes.
Así lo recojo la declaración conjunta firmada por el presidente de México, Enrique Peña Nieto, el presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, y el jefe del Ejecutivo comunitario, Jean-Claude Juncker, en la cumbre UE-México en Bruselas.
Se trata de un compromiso político sobre el calendario que, sin embargo, no está claro que pueda cumplirse en la práctica, por los procedimientos que debe cumplir la Unión Europea para poner en marcha las negociaciones formales, han explicado a Europa Press fuentes europeas.
Corresponde ahora a la Comisión Europea presentar una propuesta de negociación a los Veintiocho y esperar a que los Estados miembros acuerden un mandato, que necesitará también el visto bueno del Parlamento Europeo, lo que puede dilatar el arranque de los contactos hasta principios de 2016.
El acuerdo incluye los tres pilares tradicionales en este tipo de acuerdos, es decir, diálogo político, cooperación y comercio, lo que permitirá "revisar" las relaciones comerciales bilaterales, pero también reforzar cuestiones normativas y atender preocupaciones en materia de derechos sociales y medio ambiente.
La Unión Europea es el segundo inversor en México, pero ha perdido peso como socio comercial -tercer puesto actualmente- con la entrada en el mercado azteca d nuevos competidores como China.
La energía, el mercado digital y la salud son algunos de los sectores clave que interesan a México, tal y como ha enumerado Peña Nieto en una rueda de prensa al término de la cumbre. El sector servicios y la agricultura son también sectores a los que los mexicanos esperan que la UE abra su mercado.
La armonización normativa y sistemas de control son, por su parte, intereses de la Unión Europea, desde donde varios grupos políticos europeos como los liberales y partidos de izquierda piden mayores garantías en materia laboral, por ejemplo.
Preguntado por si teme que problemas en la negociación por las exigencias en materia de Derechos Humanos, Peña Nieto ha asegurado que su Gobierno está "altamente comprometido" con la defensa de los derechos fundamentales y que trabajan para avanzar en este campo.
Además de actualizar el acuerdo, la UE y México han llegado a otros compromisos con los que esperan revitalizar su "asociación estratégica", lo que incluye una mayor cooperación en investigación y en el desarrollo de energías sostenibles. También quieren promover la internacionalización de la educación de alto nivel y asumen luchar juntos contra el cambio climático.
Otra de las novedades de la declaración es priorizar los contactos para un registro de datos de pasajeros aéreos (PNR, por sus siglas en inglés). Sin embargo, Juncker ha advertido de que un registro similar para el intercambio de datos de pasajeros entre la UE y Canadá está siendo examinado por el Tribunal de Justicia de la UE (TUE) y que, mientras no haya un pronunciamiento sobre su legalidad, el bloque comunitario no podrá acordar otros.