Actualizado 02/11/2010 08:13

Venezuela.- La Cámara de la Construcción critica las expropiaciones de Chávez


CARACAS, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Cámara de la Construcción de Venezuela consideró que "la medida de expropiación no es la más indicada" para sancionar a aquellas empresas que violen la legislación vigente, ya que, en contra de lo pretendido por el Gobierno, retrasa la edificación de nuevas viviendas, informó este martes a través de un comunicado.

"Estas expropiaciones, lejos de aligerar el proceso de construcción de viviendas, lo retrasa, afectando a las familias venezolanas que requieren con urgencia una solución habitacional, además de generar una gran incertidumbre en aquellas otras que están en proceso de adquisición de una vivienda", reza el texto.

En este sentido, la asociación gremial consideró que dichas medidas "desestimulan la inversión privada, pues afectan al constructor y al promotor de viviendas, generando gran incertidumbre y sensación de una enorme inseguridad jurídica", informó el diario venezolano 'El Universal'.

Este pronunciamiento se produce en el marco de la última ofensiva de expropiaciones emprendida por el presidente, Hugo Chávez, que el pasado domingo anunció la nacionalización de Siderúrgica del Turbio (Sidetur) y de varios proyectos urbanísticos, apenas una semana después de hacer lo mismo con la firma estadounidense Owens-Illinois, líder mundial en la fabricación de envases de vidrio.

El mandatario explicó que nacionalizaba los proyectos urbanísticos para "finalizar su construcción" y acelerar la "adjudicación" de los apartamentos a las personas que los habían comprado y que, según indicó, están siendo objeto de usura y estafa por parte de las constructoras.

En cuanto a Sidetur, filial del principal grupo siderúrgico privado de Venezuela, Sivensa --que procesa chatarra y elabora el 40 por ciento de las cabillas en el país-- el mandatario argumentó que la empresa vende sus productos a un precio muy elevado.

En lo que se refiere a Owens-Illinois, Chávez aseguró que lleva "años explotando a los trabajadores, destrozando el ambiente, y llevándose el dinero de los venezolanos". En Venezuela, la empresa posee dos plantas y da empleo a más de mil personas, aunque el peso de estos negocios apenas representa el 5 por ciento de sus ingresos a nivel mundial.