Actualizado 23/09/2015 23:29

Volkswagen enfrenta un 'tsunami' de demandas en EEUU

   DALLAS (EEUU), 23 Sep. (Notimex/Notimérica) -

   El escándalo desatado por la empresa automotriz alemana Volkswagen (VW) por haber instalado de forma deliberada en 11 millones de automotores a diesel un software que daba falsos niveles de emisiones contaminantes, ha generado un 'tsunami' de demandas en Estados Unidos.

   El escándalo, que estalló el pasado viernes, cuando la Agencia de Protección Ambiental (EPA) emitió a la compañía un aviso de violación de la Ley de Aire Limpio, ha causado que en los primeros cinco días se hayan interpuesto al menos 46 demandas en cortes federales.

   Aunque las acciones de la compañía no han provocado accidentes o lesiones directas, las demandas interpuestas ante cortes federales en al menos diez estados argumentan diversos motivos y acusan a la compañía de defraudar y estafar a sus clientes.

   La primera de las demandas contra Volkswagen ha sido interpuesta por David Fiol, un abogado de San Francisco, el pasado 18 de septiembre, el mismo viernes en el que la EPA anunció la violación cometida por la empresa.

   Además de la ola de demandas, Volkswagen enfrenta una investigación federal por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos.

   A su vez, varios senadores han solicitado que la Comisión Federal de Comercio (FTC) investigue a Volkswagen por falsedad en los anuncios comerciales de sus motores diesel y explore posibles recursos para compensar a los consumidores.

   La Oficina del Procurador de Nueva York anunció una indagación estatal en contra de VW, en lo que podría ser la primera de una serie de averiguaciones por parte de las entidades estadounidenses que buscarían compensaciones económicas al haberse violado sus leyes y normas ecológicas.

   "A ninguna empresa se le debe permitir eludir nuestras leyes ambientales o hacer falsas promesas a los consumidores", ha indicado en un comunicado el procurador estatal de Nueva York, Eric T. Schneiderman, al anunciar la investigación.

   "Vamos a tratar de mantener una fuerte tradición de protección al consumidor y el medio ambiente de Nueva York mientras esta investigación avanza. Esperamos poder colaborar con fiscales generales en todo el país en esta materia", ha manifestado.

   Volkswagen podría enfrentar cargos criminales por parte de las diversas procuradurías y verse obligada a pagar fuertes multas por no haber reportado el asunto.

   En tanto, legisladores estatales en Tennessee planean celebrar audiencias para determinar si el presunto engaño de la empresa afectaría o no los casi 900 millones de dólares en incentivos estatales y locales que han sido concedidos a esa compañía para instalar una de sus plantas armadoras en Chattanooga.

DIMISIÓN DE SU PRESIDENTE

   Volkswagen admitió el pasado lunes que 11 millones de sus automóviles en todo el mundo pudieron haber sido equipados con el software engañoso y este miércoles, su presidente y director general, Martin Winkerton, se ha visto a renunciar.

   El escándalo que afecta a Volskwagen ha comenzado a compararse en sus dimensiones legales y ambientales con el desastre ecológico causado por el derrame de petróleo en el Golfo de México tras la explosión de un pozo de la compañía British Petroleum (BP) en abril de 2010.

   La petrolera inglesa enfrentó múltiples demandas y varias investigaciones federales y estatales que le han acarreado pagos por unos 54.000 millones de dólares en indemnizaciones, multas y costos de limpieza ambiental.

   De acuerdo con un reporte este miércoles en el periódico inglés 'The Guardian', Volkswagen habría contratado a la firma estadounidense de abogados Kirkland & Ellis, la misma que defendió a BP tras el derrame del pozo Deepwater Horizon. Sin embargo, el bufete jurídico con sede en Chicago no ha confirmado dicho reporte.

   Analistas de la firma financiera Morgan Stanley han estimado este miércoles que Volkswagen podría enfrentar multas y compensaciones por el orden de 9.000 y 27.000 millones de dólares. La automotriz ha informado de que ha apartado unos 8.000 millones de dólares de sus ingresos para hacer frente a las responsabilidades.