Los días 13 y 14 de noviembre se celebrará el XV encuentro empresarial iberoamericano.
Las temáticas serán muy variadas, pero el certamen girará entorno a cómo la ciencia acelera las transformaciones hacia el desarrollo sostenible, publicado en noviembre de 2023, en lo que respecta a la Agenda 2030 los ODS están muy lejos de cumplirse. De acuerdo con los datos analizados, de las 36 metas planteadas por la agenda, sólo 2 estaban -por aquel momento- "en vías de alcanzarse".
Este panorama plantea profundas cuestiones en cuanto al imaginario global de desarrollo, subraya la necesidad de revisar los mecanismos de acción, reforzar compromisos y acelerar los esfuerzos, y también desafía a pensar -una vez más- sobre el futuro. De ahí que uno de los temas esenciales de la Cumbre del Futuro de Naciones Unidas sea "impulsar decididamente las acciones para los Objetivos de Desarrollo Sostenible" a través de "un multilateralismo inclusivo, interconectado y eficaz para responder mejor y ofrecer resultados a las personas y al planeta". (2)
Se trata de un debate clave para Iberoamérica donde según el III Observatorio de la Sostenibilidad, elaborado por EAE Business School, CEIB y FIJE, más del 63% de las empresas ha incorporado los ODS en su estrategia o están en proceso de hacerlo.
Este segmento propone abordar la integración de los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) y las finanzas responsables como mecanismos cruciales para que Iberoamérica avance hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
El papel fundamental de la igualdad de género para construir sociedades igualitarias y prósperas ha sido un tema central en la conversación iberoamericana desde hace tiempo. Sin embargo, en la región persisten desafíos significativos que frenan el avance en múltiples aspectos. En América Latina las mujeres continúan participando casi un 25% menos que los hombres en el mercado laboral formal; tienen menos probabilidades de promocionarse. En consecuencia, sufren una persistente brecha salarial -que impacta sobre sus futuras pensiones- y una falta de representación en los niveles más altos de las empresas: actualmente solo un 20% de los cargos en las juntas directivas a escala global están ocupadas por mujeres, siendo esta tasa aún más baja en América Latina, con un 10,4%.
Además, enfrentan numerosas barreras para emprender y mantener sus negocios y están expuestas a mayor discriminación y desigualdad durante todas las etapas del ciclo empresarial, entre estas, el acceso al crédito: las mujeres tienen un 25% menos de posibilidades de acceder a inversión que los hombres; dato que, en el ámbito tecnológico, desciende aún más. Esta diferencia en el acceso a créditos entre hombres y mujeres es consecuencia de los estereotipos y prejuicios de género: la mitad del planeta sigue creyendo que los hombres están más capacitados para ser líderes.
Hablar de desarrollo económico y social en Iberoamérica supone necesariamente abordar la capacidad de innovar de los países que la conforman. Se trata de un factor determinante en la creación de productos y servicios, modelos de negocio y soluciones a desafíos tan diversos como complejos, que el valor de la discusión ya no está en reiterar su importancia, sino explorar sus posibilidades. En este debate, un perfil empresarial emergente que lidera la economía del conocimiento y desarrolla empresas de base tecnológica, tiene aportaciones esenciales que realizar.
Por eso, en esta ocasión se abordarán tres temas que implican desafíos urgentes y oportunidades latentes de la mano de voces expertas en cada uno de ellos: el primero es el papel de la inteligencia artificial para transformar sectores clave en las economías iberoamericanas. Está claro que el mundo avanza en una dirección en la que la IA cobra cada vez más relevancia en múltiples dinámicas de nuestras sociedades, e Iberoamérica no es la excepción. Por eso mismo, urge una comprensión compartida de las oportunidades que supone esta tecnología, un diagnóstico de los retos en materia de conocimiento, infraestructura y normativa, y una agenda común para garantizar que en el Espacio Empresarial Iberoamericano este fenómeno sea verdaderamente un motor de desarrollo y no una profundización de otras brechas ya existentes.